Durante los últimos meses no han sido pocas las startups españolas que han conseguido levantar capital de inversores extranjeros y, más concretamente, de fondos de venture capital americanos. Muchos de ellos miran a nuestro país para realizar inversiones en compañías con potencial de crecimiento y de internacionalización en EE.UU., pero, ¿cuáles son los principales retos y estrategias que es necesario superar?
DELAWARE FLIP
El objetivo de un fondo de venture capital es invertir para, pasados unos años (normalmente alrededor de cinco), desinvertir y poder maximizar la rentabilidad conseguida. Estos inversores piensan en su salida desde el momento inicial, lo que hace que tengan siempre en mente todas las posibilidades. Es así como, el objetivo de los fondos americanos puede ser invertir en una empresa extranjera que convertirán en americana para facilitar su crecimiento e internacionalización. Pero, ¿cómo se lleva a cabo esta transformación? Una opción típica es a través de una estructura llamada “delaware flip”.
En concreto, se trata de un proceso a través del cual se constituye un holding en Delaware cuyo objeto social será invertir en otra sociedad, en este caso, una startup española, por ejemplo. De esta manera, los socios de la empresa emergente dejarán de serlo de forma directa, para pasar a tener títulos de este nuevo holding, que es 100% americano. Los venture capital entrarán directamente en el capital social de esta firma de nueva creación.
Los objetivos de tener este holding americano son claros:
- En EE.UU. hay más liquidez y capital para invertir que en Europa. Por tanto, los venture capital se encuentran más cómodos pensando en que tienen más opciones de salida. Allí hay más empresas realizando operaciones de M&A con regularidad y, además, los mercados y la Bolsa (tanto la de Nueva York como el AMEX) son más fuertes que sus homólogas europeas.
- Por otra parte, si el objetivo de la startup es expandirse por EE.UU., a nivel comercial, siempre es mejor si es una empresa americana. Simplemente, se trata de un tema cultural.
IDIOMA Y CULTURAS DIFERENTES
Llevar a cabo un delaware flip puede ser una catalizador de cambio para conseguir atraer a los venture capital estadounidenses, pero, además, hay que analizar algunos aspectos importantes a la hora de realizar cualquier tipo de transacción con estos inversores.
En primer lugar, hay que tener en cuenta el idioma. Sí, aunque parezca poco relevante, debemos tener en mente que los documentos y las negociaciones van a estar en inglés, por lo que es fundamental controlar el idioma y tener asesores que estén 100% familiarizados con los términos.
A nivel cultural, los inversores americanos también son muy diferentes. En EE.UU. se pueden realizar procesos de compraventa a través de un PDF, mientras que en España es necesario firmar ante notario. Eso provoca que, en ocasiones, sea necesario crear un poder para que los inversores estén representados por alguien físicamente en España. Por último, es fundamental tener en cuenta que, para los americanos, “el tiempo es oro”, por lo que suelen ser muy directos en sus negociaciones.
VENTAJAS
A pesar de que sea necesario salvar algunos retos, contar con inversores americanos en el accionariado suele ser muy positivo para el crecimiento de la compañía, que puede conseguir tener muchas más facilidades en el momento de su expansión internacional.
Además, una vez que un fondo se convierte en “lead investor” en una ronda de financiación, puede liderar las siguientes etapas, atrayendo otros inversores y promoviendo el crecimiento de la compañía.
Durante los últimos años ha crecido exponencialmente el interés de inversores extranjeros y, más concretamente, americanos, por nuestras startups, algunas de ellas consideradas ya unicornios. Así es el caso de Cabify, que también realizó un delaware flip como parte de sus primeras rondas de financiación.