Singularu se marca un nuevo reto tras el cierre de una ronda de financiación de un millón de euros

La marca de joyas española Singularu se marca un nuevo reto, con el que expandirá el modelo de negocio de la empresa internacionalmente, tras el cierre de una ronda de financiación de un millón de euros.

La marca que lleva inmersa unos meses en un proceso de apertura de nuevas tiendas físicas tras el éxito de su canal digital, estima la apertura de una serie de locales con el objetivo de lograr su expansión internacional. En este sentido, cerca de un 50% de la ronda de financiación se ha suscrito por sus socios actuales entre los que se encuentran Pinama Inversiones, Zriser y Demium Ventures, entre otros.

Junto con ellos, también han pasado a formar parte del equipo de accionistas los fondos Faraday Venture Parteners, Bamboo Venture Capital y Torsa Capital. En lo que se refiere a los puntos de venta con los que cuenta la marca de joyas se encuentra Valencia y Madrid. Esta última con dos localizaciones en la capital.

Sin embargo, el objetivo que guía a la startup es llegar a los 90 en 2021, una cifra ambiciosa. Al hilo de ello, y como primer paso para el cierre de este ejercicio, Singularu prevé acabar el año con 17 puntos de venta, puesto que la semana siguiente pasarán a estar presentes en El Corte Inglés, en forma de cortner.

Singularu, con Cristina Aristoy al frente del producto, se ha convertido en la marca de joyas de España que más novedades genera al año. De hecho, solo en 2017 lanzaron al mercado más de 150 nuevos modelos a partir del análisis de tendencias, joyas que fabrican en Plata de Ley y Oro.

La compañía, desde que naciera en Demium Startups, ha contado con el apoyo de aceleradoras como Conector o Lanzadera y ahora ya prevé cerrar 2018 con una facturación cercana a los cuatro millones de euros. En la actualidad, la producción de Singularu se realiza en fábricas de Extremadura, Valencia, La Rioja y Cataluña.