“Queremos seguir contribuyendo a la transformación del sector alimentario a través del desarrollo de tecnología y el fortalecimiento de las propuestas FoodTech”

En 1981, la Asociación Industrial de Conservas Vegetales del Valle del Ebro creó el Centro Nacional de Tecnología y Seguridad Alimentaria (CNTA), una asociación privada sin ánimo de lucro que tenía el objetivo de contribuir al desarrollo e innovación de las empresas alimentarias y por  extensión, favorecer la competitividad del sector. A lo largo de cuatro décadas, el CNTA ha evolucionado conforme a las exigencias  del  entorno  y  demandas del mercado agroalimentario para conseguir cubrir cualquier necesidad tecnológica de cualquier subsector de la industria agroalimentaria.

A día de hoy, es un centro tecnológico que tiene el propósito de ser un referente nacional y de contribuir a la mejora de la competitividad y de la calidad de todo el sector agroalimentario. Como todo centro tecnológico, el CNTA desarrolla dos tipos de actividad: por un lado, se dota de conocimiento, a través de los proyectos de investigación financiados en ocasiones por las administraciones europeas, nacionales y autonómicas; y por otro, traslada el conocimiento adquirido a las empresas a través del desarrollo de proyectos de I+D, de los servicios tecnológicos que presta y de la formación que imparte. Para ello cuenta con un equipo de más de 170 personas,  entre  las que  se  encuentra  un  gran  número  de  tecnólogos  altamente cualificados. 

La vocación del CNTA es alcanzar la excelencia tecnológica, orientar sus actividades a la obtención de resultados y adquirir un compromiso con cada cliente y socio. Todo ello estando a la vanguardia de los últimos avances y tendencias, con el objetivo de ayudar a la industria a resolver sus retos y a diferenciarse en el mercado. En El Referente hemos hablado con Estefanía Erro, directora de Marketing e Innovación de la institución, con motivo de la convocatoria del segundo programa FOOD (TECH)2 CHALLENGERS.

¿Por qué habéis decidido convocar la segunda edición de este programa?

Queremos seguir contribuyendo a la transformación del sector alimentario a través del desarrollo de tecnología y fortalecimiento de las propuestas que realizan las startups Food Tech.

¿Qué balance hacéis de la edición que tuvo 2021? ¿Qué os aportó para querer repetir?

La valoración de la primera edición del programa es muy positiva. Abordamos junto con cuatro startups retos tecnológicos de gran impacto en el sector, con unos resultados que han permitido lograr avances significativos en cada uno de los proyectos: Sonicat Systems pudo validar el potencial de su tecnología de ultrasonidos para mejorar la eficiencia en la extracción de compuestos de lúpulo en la producción de cerveza; Rethink Foods consiguió desarrollar una salsa de chocolate vegana, clean label y sin gluten, y avanzar en el desarrollo de un barquillo con las mismas características, con el objetivo de preparar su salto al mercado de helados hand-held; MOA Foodtech logró avanzar en la optimización del proceso de obtención de proteína microbiana realizando ensayos con diferentes condiciones de secado. Por su parte, Ingredalia abrió nuevas vías innovadoras para la obtención de proteína vegetal a partir de subproductos del brócoli que podrían constituir una nueva opción para la formulación en análogos cárnicos y de pescado.

¿Qué tipo de relación mantenéis con las startups que han pasado por vuestro proyecto?

La intención de CNTA es establecer un vínculo con las startups que vaya más allá de la duración del programa y acompañarlos en su evolución posterior como partner tecnológico.

¿Cuál será el futuro de Food Tech2 Challengers? ¿Cómo os veis más a largo plazo?

Pretendemos que el programa sea una iniciativa que contribuya a mejorar la solvencia tecnológica de las startups Food Tech españolas. Asimismo, nuestra intención es que esta iniciativa se enmarque en una estrategia más amplia de innovación abierta con la que buscamos potenciar las relaciones de colaboración entre los diferentes agentes del sector para impulsar proyectos innovadores, los cuales aporten soluciones a los grandes retos que tenemos por delante.

El programa está financiado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. ¿Cómo habéis llegado a este acuerdo? ¿Cuál es vuestra relación con las instituciones públicas?

CNTA es un modelo de colaboración público-privada que trabaja para mejorar la competitividad y calidad de la industria alimentaria. En su Consejo Rector participan diferentes agentes e instituciones representando a los socios; entre ellos, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA). Llevamos mucho tiempo trabajando con el MAPA y en 2018 abrimos una nueva vía de cooperación, a través de convenios con este organismo público, para promover actividades de innovación abierta, que fomenten la colaboración entre empresas corporate, partners tecnológicos, como CNTA, y startups.

¿Por qué creéis que es importante que estas apuesten por las startups, el emprendimiento y programas como el vuestro?

Cada vez más se habla de la necesidad de transformación del sector alimentario. Existen grandes retos que nos demandan cambios y nuevas soluciones. Entre estos desafíos podemos hablar de población creciente, cambio climático, sostenibilidad, incremento de costes, tensiones en la cadena de suministro, pandemias, consumidores con necesidades especiales, etc., que nos obligan a pensar en la mejor solución para poder solventar ese reto.

En esa transformación, las startups son uno de los agentes más dinámicos desarrollando tecnología para afrontar tantos y tantos retos, ¿cómo no apoyarlas con todas las herramientas y recursos posibles? Este desarrollo nos afecta a todos y sólo alineándonos y colaborando podrá ocurrir con un impacto positivo. 

Elegiréis entre cuatro y ocho startups. ¿Qué es lo más importante que deben tener en cuenta si quieren presentarse? ¿Qué recomendaciones les dais si quieren formar parte de una iniciativa como esta?

Deben retarnos. Nos tienen que hacer entender por qué necesitan desarrollar su tecnología para conseguir un hito en su camino hacia el éxito. Queremos ver cómo van a impactar en el mundo.

El programa lo articulamos en torno a los retos tecnológicos y nos centramos en darles solución. Por eso, las startups que quieran presentarse deben tener claro cuáles son sus retos y qué pasos han de dar para abordarlos.

¿Por qué habéis optado por una modalidad equity free? ¿Qué otras ventajas recibirán las startups?

Desde CNTA, como centro tecnológico de referencia en España, lo que buscamos es potenciar el nivel tecnológico de las startups Food Tech españolas; que mejoren su capacidad para proponer soluciones innovadoras. Este programa está financiado íntegramente por el MAPA.

Las startups seleccionadas tendrán acceso a tecnología de vanguardia que permita avanzar en el desarrollo de la solución tecnológica; una gran visibilidad, con presencia destacada en los canales y actividades de comunicación de CNTA; acompañamiento por parte de un experto de nuestro centro, en el ámbito tecnológico específico de cada proyecto; y durante el período de duración del programa, la startup formará parte de la Comunidad Especie CNTA, teniendo acceso a todos sus beneficios.

¿Cuál es entonces el beneficio para CNTA? ¿Qué os lleváis, qué aprendéis?

Este programa está completamente alineado con el propósito de CNTA, que busca poner su conocimiento y capacidades al servicio del avance del sector. Sin duda, nos llevamos grandes aprendizajes en varias dimensiones. Es evidente que hay un aprendizaje en las personas de nuestra organización, no solo de las metodologías ágiles y el enfoque lean que las startups llevan en su ADN, sino también a un nivel más técnico y de tendencias en un sector que está innovando a un ritmo vertiginoso.

¿Qué relación teníais desde CNTA con las startups antes de la creación del programa? ¿Cómo ha evolucionado?

Llevamos muchos años trabajando con startups, siempre con este enfoque de partner tecnológico y buscando relaciones de colaboración que atiendan a sus necesidades y características. En ese sentido, el programa nos ha permitido dar un salto tanto cualitativo como cualitativo en estas relaciones.

¿Y con el ecosistema foodtech en concreto?

Siempre trabajamos en el ámbito Food Tech.

¿Por dónde pasa el futuro de dicho sector? ¿Qué papel queréis cumplir en el mismo?

Estamos en un periodo de transformación y CNTA quiere estar junto a las startups como partner tecnológico. La tecnología es una pieza fundamental de la evolución y competitividad en los próximos años. España tiene que ser un polo de atracción para crear la alimentación del futuro, utilizando las técnicas más avanzadas. Debemos ser capaces de desarrollar la última tecnología aquí, en nuestro país, para así no tener que importarla.

Los interesados en inscribirse en el programa Food (Tech)2 Challengers pueden hacerlo aquí.