"Uno de los retos que tiene la administración es ser más ágil y conectar más con los ciudadanos"

Green Urban Data es una empresa fundado por dos amigos y socios: Alejandro Carbonell y José Miguel Ferrer. Arquitectos, emprendedores y padres de familia idearon Green Urban Data con el objetivo de crear ciudades saludables para mejorar la calidad de vida de las personas.

Green Urban Data es una plataforma de big data ambiental para ayudar a las ciudades en su adaptación al cambio climático. Su función es facilitar la toma de decisiones orientadas al desarrollo de estrategias ambientales y de mejora de la calidad de vida de los ciudadanos. Entre sus productos, SaaS indicadores ambientales, SaaS regulador de temperatura o aplicación de rutas saludables. Y entre sus clientes, ayuntamientos, a quienes ayudan en la consecución de sus planes estratégicos de adaptación al cambio climático con soluciones medibles y contrastadas, consultoras, a quienes proporcionan las herramientas para aumentar la precisión en susproyectos de asesoramiento, y ciudadanos, a quienes empoderan para que logren hábitos más saludables y conscientes, mejorando su calidad de vida.

Como empresa de impacto social y ambiental, esta startup ha recibido el apoyo de la aceleradora EIT Climate-KIC, una comunidad de conocimiento e innovación impulsada por el Instituto Europeo de Innovación y Tecnología (EIT) con un programa centrado en impulsar iniciativas que combatan el cambio climático y que, actualmente opera en 24 países con 28 oficinas en toda Europa, incluyendo las principales capitales del continente, como Bruselas, Londres, París y Berlín. José Luis Muñoz lidera la sede española. 

Vuestra solución exige necesariamente un compromiso institucional contra el cambio climático, ¿existe en España?

No es necesario que nuestro cliente tenga un compromiso contra el cambio climático para poder implantarlo.

En líneas generales sí que existe un compromiso institucional contra el cambio climático. Cada vez nos encontramos más Ayuntamientos que están preocupados por fenómenos como la Isla de Calor Urbana, los problemas de inundabilidad por las lluvias torreciales, etc. Y aquellas ciudades en las que este compromiso no está muy definido, se desarrollan acciones de mejora del entorno urbano para mejorar la calidad de vida de las personas.

Con lo que podemos concluir que lo que sí encontramos es un compromiso por mejorar la calidad de vida de las personas y ese es uno de los objetivos principales de Green Urban Data.

¿Notáis una diferencia entre el ritmo y las exigencias de los ciudadanos frente al sector público?

El sector público está intentando adaptarse a las exigencias de los ciudadanos lo más rápido que puede. El problema es que son instituciones muy grandes y muchas veces esos cambio tardan en verse reflejados en acciones concretas que demanda la ciudadanía.

Uno de los retos que tiene la administración es ser más ágil y conectar más con los ciudadanos, y se está apostando por la digitalización y la transparencia para poder alcanzar este objetivo.

¿Cómo son precisamente vuestras relaciones con los ayuntamientos? ¿Con cuáles trabajáis?

Actualmente trabajamos para los Ayuntamientos de Valencia, Zaragoza, Fuelabrada, Torrent y Alcoi, y hemos desarrollado trabajos más puntuales con otros como Gandía y Elda.

Si algo tenemos que destacar de los Ayuntamientos con los trabajamos son las ganas que tienen de ayudarnos en mejorar nuestra solución.

A través de entrevistas y tests, les preguntamos cómo podríamos darles un mejor servicio para que mejore su gestión. Y tienen una gran predisposición a ayudar porque saben que va repercutir en una mejora de sus servicios al ciudadano.

¿Cuáles son los indicadores ambientales más relevantes que deberían monitorizar los municipios?

Nuestra herramienta es capaz de analizar y monitorizar más de 100 indicadores, resumidos en seis categorías:

• Temperatura y Clima.
• Vegetación.
• Actividad Urbanística.
• Contaminación del Aire.
• Contaminación Lumínica.
• Costa y Calidad del agua de mar.

Actualmente, nuestro cliente dentro de los Ayuntamiento son los departamentos de Medio Ambiento o Cambio Climático, por lo que los indicadores que más utilizan son los de Vegetación para mejorar la gestión de arbolado, y los de Temperatura y clima para evaluar el impacto del fenómeno de las Islas de calor Urbanas. Creemos que poco a poco, conforme comiencen a llevarse a cabo acciones de mejora en las ciudades en las que tengan en cuenta el impacto del cambio climático, habrá otras categorías de indicadores que también tendrán mucha importancia.

¿Qué porcentaje de ayuntamientos lo hace en España?

El gestionar las ciudades a través de indicadores es algo que cada vez se está imponiendo más en las ciudades. La necesidad de evaluar los resultados de Proyectos Europeos o de mejorar la transparencia hacia el ciudadano en las pollíticas públicas, está llevando al gestor público a introducir indicadores para evaluar su toma de decisiones.

Cada vez va a ser más necesario para una toma de decisiones estrategicas y en base a datos objetivos, así como la implantación de indicadores de calidad.

¿Qué ciudades del mundo son referentes en su adaptación al cambio climático?

Hay muchas organizaciones que engloban ciudades o municipios que luchan contra el cabio climático. Desde el Pacto de Alcaldes por el Clima y la Energía, el C40 Cities, ICLEI (Local Goverments for Sustainability), hasta la Red de Ciudades por el Clima. Estas son solo una pequeña muestra de este tipo de organizaciones.

Si tuviera que destacar ciudades referente a nivel nacional destacaría Madrid, Barcelona o Vitoria, y, a nivel internacional, Copenhague, Vancouver y Singapur, entre otras muchas.

¿Qué medidas consideráis que habría que importar e implantar?

Cada ciudad tiene su propia problemática por lo que cada una de ellas deberá elegir qué tipo de medidas debe implantar para mejorar.

Entre las que más destacan dentro de las ciudades que están llevando a cabo grandes avances en adaptación a cambio climático son las Soluciones Basadas en la Naturaleza (NBS): infraestructura verde, cubiertas vegetales, corredores verdes, jardines verticales etc; creación de una movilidad sostenible, y planes de protección frente a inundaciones.

¿Cuál es la relación entre una ciudad saludable medioambientalmente y una economía sana?

A día de hoy no se ha podido establecer una relación entre una ciudad saludable medioambientalmente y una economía sana, pero eso está cambiando. Siempre miramos a la Administración Pública como agente de cambio en la ciudad para resolver el problema del impacto que tiene el cambio climático, pero las empresas tienen mucho que decir y mucho que proponer, ya que ellas son parte del tejido productivo de las ciudades.

No hacemos más que escuchar que las empresas que quieran seguir generando beneficios en los próximos años deberán incorporar parámetros de sostenibilidad en su actividad. Y por eso las ciudades pueden convertirse en un gran laboratorio para experimentar fórmulas que lo permitan.

Utilizáis tecnología de satélite o big data, ¿cómo ha sido ese desarrollo tecnológico? ¿Cuáles han sido los momentos claves hasta conseguir el SaaS que buscabais?

Desde el principio del proyecto buscamos tecnologías que nos permitieran obtener información para la mejora ambiental de cualquier ciudad de mundo, con la idea de poder desarrollar una solución global. Esto nos llevó al análisis de la información que recogían los satélites que, a través de la teledetección, podíamos trasladar a los entornos urbanos a través de Infraestructuras de Datos Espaciales (IDEs).

A nuestro conocimiento en cambio climático y su impacto en las ciudades, le añadimos el conocimiento que nos proporcionaba la información que recogían los satélites, y dió como resutado a Green Urban Data.

Nuestro primer MVP era más una plataforma SIG (Sistema de Información Geográfica) a través de la cual los gestores públicos podían estudiar los problemas que el cambio climático estaba generando en sus ciudades. Pero nos dimos cuenta que los gestores necesitaban algo más ágil, tipo consulta con información relevante y geolocalizada en el territorio.

De aquí empezó a surgir el SaaS que actualmente comercializamos para la mejora de la gestión ambiental de las ciudades.

Climate-KIC ha apostado por vosotros para incorporaros en su aceleradora, ¿qué ha visto en vosotros? ¿Qué os hace especiales en el ecosistema?

Nuestra relación con Climate-KIC viene desde hace tiempo. En 2013 tuvimos la oportunidad de formar parte del programa “Pionners into practise” que nos abrió los ojos a la innovación como motor de cambio para conseguir una economía baja en carbono. A partir de aquí siempre hemos tenido mucha relación a través de las jornadas que Climate-KIC organiza así como las reuniones de “Pioneros” que todos los años se llevan a cabo. Y siempre han estado al tanto de nuestros avances y trayectoria.

Por eso cuando solicitamos acceder a la aceleradora ellos ya conocían nuestro background y nuestra resiliencia a la hora de enfrentarnos a nuevos retos como es emprender. A esto se añadió que el proyecto que presentamos estaba muy alineado con los objetivos de Climate-KIC.

Creo que estos dos factores (conocer a las personas que ejecutarán el proyecto y el macthing con sus objetivos) fueron claves.

¿Y a Climate-KIC? ¿Cómo habéis cambiado tras pasar por su programa?

Una de las características que hace a Climate-KIC aceleradora de referencia es la temática que aborda. Tiene muy claro qué tipo de empresas busca y sabe qué necesitan este tipo de empresas par dar el salto al siguiente nivel.

Gracias a su programa pudimos acceder a una red de mentores especialistas en el sector del emprendimiento enfocado a conseguir una economía baja en carbono.

Esto nos ha ayudado a mejorar el enfoque de nuestros servicios así como nuestra relación con los clientes.

¿Cómo fueron vuestros inicios con respecto a la financiación? ¿De dónde salieron los recursos para levantar Green Urban Data?

El proyecto nace tras recibir una Ayuda de Innovación Social del Ayuntamiento de Valencia, que utilizamos para desarrollar un MVP (Producto Mínimo Viable) con el fin de analizar el interés por parte de as Administraciones Públicas en este tipo de proyectos. Tras diferentes presentaciones y visitas a posibles clientes vimos que el servicio que estabamos desarrollando tenía mercado.

Y a través del Programa Lanzadera Garaje obtuvimos nuestra primera financiación privada para poder generar una empresa desde una idea.

¿En qué punto os encontráis en este sentido? ¿Cuáles son las claves para que una empresa que apuesta por la sostenibilidad triunfe?

A día de hoy no hemos realizado ninguna ronda de inversión, hemos apostado por un crecimiento orgánico de la empresa, a través de la facturación de nuestros clientes. Eso no nos permite crecer muy rápidamente, pero sí que podamos seguir el camino que nosotros marcamos y no el de un inversor.

Esto no significa que estemos en contra de la inversión para crecer, sino que nuestra elección se debe a que conocemos a nuestro cliente y sabemos que sus tiempos son diferentes a los de otras empresas.

Actualmente todo el mundo nos dice que la sostenibilidad está de moda y que eso nos va ayudar a vender. Pero no nos engañemos, eso no es del todo cierto. Para que una empresa que apuesta por la sostenibilidad como modelo de negocio triunfe no solo depende del momento, que es muy importante, sino que resuelva una necesidad del cliente, sea cual sea.

¿Qué será de Green Urban Data en 2020? ¿Qué objetivos os habéis marcado?

Esperamos que este año sea el nuestro. Durante 2019 hicimos un gran trabajo de prospección y difusión de nuestra empresa y esperamos recoger los frutos de todo lo que hemos sembrado.

Nuestros principales objetivos van a ser seguir avanzando en aumentar nuestras métricas de impacto, afianzar nuestra presencia dentro de las Adminsitraciones Públicas y buscar alianzas con grandes emrpesas que nos ayuden a tener una mayor penetración en el mercado para seguir creciendo y escalar con nuestro producto.

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