"La sostenibilidad es el aspecto más fundamental y urgente que debemos a abordar en el turismo"

Turismo Andaluz es el nombre comercial de la Empresa Pública de Turismo y Deporte de la Junta de Andalucía, cuya función es la promoción y desarrollo del sector turístico andaluz. En la actualidad disponen de un departamento denominado Andalucía Lab, que tiene como objetivo crear un hub para startups del sector turístico. Desde su centro en Marbella la entidad impulsa la industria turística andaluza desde una perspectiva tan práctica como innovadora.
Lisardo Morán, director gerente de la Empresa Pública Turismo y Deporte de Andalucía, cuenta con experiencia previa en el sector turístico, habiendo trabajado durante ocho años en Turismo y Deporte de Andalucía, como consultor en Andalucía Lab para la mejora de la presencia digital de las empresas turísticas andaluzas y como técnico de la Subdirección de Publicaciones y Relaciones Institucionales. Con él habla El Referente sobre los fines de Andalucía Lab y su próximos pasos.
¿Cuáles son las apuestas estratégicas para el desarrollo del turismo en Andalucía?
La estrategia del destino Andalucía se encamina hacia un turismo de más calidad, mayor impacto económico, con estancias más largas y una mayor distribución en el tiempo y el territorio. Un turista que alargue o multiplique sus estancias y genere un gasto elevado, para que ello revierta en nuestro tejido empresarial y social.
Además, trabajamos en combinar el enorme talento que hay en Andalucía con lo mejor y lo más diferencial de nuestra oferta, posicionando a Andalucía como destino, como oportunidad y como proyecto de vida.
También se ha avanzado en el modelo de gestión, integrando a los empresarios con el objetivo de impulsar la corresponsabilidad y la cogobernanza de esta industria y hacer partícipe al sector privado de la toma de decisiones.
En definitiva, trabajamos por un nuevo modelo de desarrollo turístico basado en la inteligencia, que aplique criterios de sostenibilidad, accesibilidad y calidad en los destinos, promueva la innovación y la digitalización y apoye a sectores poco consolidados que posibiliten la diferenciación del destino.
¿Qué importancia tiene dicho sector en la región?
La industria turística generó en Andalucía un total de 22.553 millones de euros el pasado año, más de 15.200 millones de forma directa y 7.300 millones indirectamente. Se demuestra de este modo el efecto multiplicador del turismo, ya que por cada euro que consume la demanda turística en el conjunto de Andalucía, nuestra economía produce por valor de 1,48 euros.
Estamos hablando de una industria que genera el 13 por ciento del PIB y que supone un porcentaje similar del empleo. En el caso de Andalucía, es una de nuestras principales actividades económicas, con tradición, porque llevamos muchos años en esto y hemos sido pioneros en España y en Europa, pero también con presente y con futuro.
El turismo es la industria que está sustentando en gran parte la reactivación económica tras la pandemia y, en consecuencia, la generación de empleo. Contamos con experiencia, magníficos profesionales, calidad y diversidad; y también con una oferta que encuentra difícil comparación, extraordinariamente complementaria y de primer nivel.
Empresas, profesionales, trabajadores y la propia ciudadanía es consciente de la importancia del turismo en la comunidad y esta conjunción hace que Andalucía lleve décadas siendo uno de los mejores destinos del mundo.
¿A qué retos se enfrenta en el corto o medio plazo el sector turístico andaluz?
Probablemente la sostenibilidad sea, no solo en Andalucía sino en todo el mundo, el aspecto más fundamental y urgente que debemos a abordar en el turismo y en cualquier otra industria y actividad.
El turismo es uno de los sectores que más en serio está abordando este reto, porque tenemos muy claro que la sostenibilidad no es una cuestión de imagen, es una obligación ineludible para el mantenimiento de la actividad.
Toda la acción turística debe enmarcarse en términos de sostenibilidad medioambiental, económica y social. Este objetivo se refleja en nuestro Plan Meta 2027, el Plan General de Turismo Sostenible, centrado en la sostenibilidad y que pone en valor más de 40 estrategias y programas.
Iniciativas encaminadas al control de la capacidad de carga de los territorios, la cohesión territorial, la redistribución de los beneficios económicos, la formación, la innovación, nuevos modelos de co-gobernanza que tengan en cuenta a la ciudadanía, la protección medioambiental o el impacto de la huella de carbono.
Por otra parte, a nivel mundial, a corto plazo uno de los mayores retos tras la pandemia, en el que se ha avanzado enormemente como demuestran los resultados de los últimos meses, era la recuperación de la confianza del viajero.
La confianza del viajero solo se obtiene a partir de la excelencia, un elemento que la comunidad siempre ha tenido como base y meta de su oferta turística; en el servicio, en la atención al viajero y en la calidad de cualquiera de sus propuestas.
El turista reclama hoy en día singularidad, diferenciación y experiencias, ámbitos en los que la comunidad es especialmente competitiva.
¿Qué papel juega la innovación en la resolución de esos retos?
Andalucía ha sido un destino líder desde mucho antes de que el turismo pudiera considerarse una industria. Y ha mantenido una posición privilegiada durante décadas hasta llegar al día de hoy, en el que sigue siendo una referencia mundial.
Eso solo se consigue reinventándose, adaptándose al entorno y a las nuevas demandas, persiguiendo la excelencia y realizando un enorme esfuerzo por parte de las empresas, profesionales y trabajadores e incluso de la propia ciudadanía, consciente de la importancia de esta industria en la comunidad
Esa apuesta continua por la reinvención es la que ha permitido que Andalucía haya sabido ir siempre un paso por delante, innovando sin perder nuestra esencia, lo que hace a Andalucía un destino auténtico, único, de gran historia y tradición.
¿Y el sector público? ¿Cuál es vuestro papel?
Turismo y empresa son obligados compañeros de viaje de un nuevo tiempo que debe forjarse de la mano del sector público y privado. Cuestiones tan importantes como la conectividad del destino, productos que contribuyan a la desestacionalización, la formación y refuerzo de la imagen de los trabajadores y la mejora de la percepción de esta actividad en la sociedad son ya cuestiones que están aplicándose o diseñándose conjuntamente.
La innovación, la actualización de la oferta y la colaboración entre empresas debe ser fruto de un esfuerzo continuo y ese es un compromiso que asume el sector público y la Consejería en este caso.
Fundamentalmente debemos ser facilitadores. Ayudar a empresas, profesionales y trabajadores a adaptarnos a un entorno en constante cambio, acelerado en los últimos años por distintas circunstancias que todos conocemos.
Este trabajo conjunto público y privado es el que permite que Andalucía esté preparada para estar en cabeza en este necesario proceso innovador. Y también para compartir nuestros logros, conocimientos y experiencias para impulsar un turismo sostenible y beneficioso para todos a nivel global.
¿De qué manera se relacionan los emprendedores con los sectores más tradicionales? ¿Cómo fomentáis las relaciones entre ambos?
El turismo es una industria transversal, en la que están implicadas tanto sectores muy innovadores como los más tradicionales, y por eso se hace un esfuerzo en integrarlos a todos en nuestra estrategia.
Una de las líneas como decía es facilitar la transferencia de conocimientos y buenas prácticas entre las empresas. Nuestro objetivo es crear un verdadero ‘think tank’ que permita evolucionar el ecosistema empresarial turístico andaluz, aprovechando el propio talento en cualquier sector que pueda tener relación con esta industria. Se trata de mejorar en competitividad y rentabilidad a través de la experiencia de nuestros profesionales, sea cual sea el sector.
Somos además referentes en innovación turística con Andalucía Lab, que realiza una apuesta por crear en la región una comunidad de empresas tecnológicas, como un punto de referencia para la atracción de talento y la evolución de las pymes y los destinos turísticos andaluces.
¿Cuáles son las líneas de trabajo para el apoyo al emprendedor y a la innovación en el sector turístico?
En primer lugar debemos tener en cuenta que la innovación no es solo tecnológica, siendo clave innovar en la gestión. Precisamente, el Plan General del Turismo Sostenible de Andalucía META 2027 se basa en un nuevo modelo de gestión que apuesta por la sostenibilidad, el desarrollo territorial, la gobernanza participativa y una nueva mirada sobre el territorio y el fomento del consumo responsable.
Además, prioriza la formación y el empleo estable y presta especial atención al marketing turístico, con la innovación y la tecnología como aliados.
También está en marcha el proyecto regional ‘SmartData’, iniciativa de ‘big data’ que responde a la necesidad de contar con una plataforma que permita contar con el mayor número de datos posible, con el objetivo de que destinos y empresas tengan acceso a información que les ayude a planificar y a tener un conocimiento mayor de la demanda.
En un contexto en el que la transformación digital en la sociedad en general y en la industria turística en particular es ya una realidad, estamos inmersos en un proceso de adaptación también hacia el sector privado, trabajando en ayudar a digitalizar el empresariado turístico a través del NAC (Andalucía Network & Connect), un Market Place o un CRM que haga más efectivas las inversiones del tejido empresarial y la administración turística andaluza.
¿Qué es Andalucía Lab y qué ofrece a los emprendedores?
Como le comentaba previamente, Andalucía Lab viene a reforzar el ecosistema de empresas tecnológicas andaluzas que prestan sus servicios en la industria turística andaluza y la comunidad de empresas turísticas y profesionales que innovan en producto, gestión de procesos y sistemas de distribución.
El camino que utiliza para hacerlo es ayudarlas a conectar con sus mercados, tanto regional como internacionalmente, con el objetivo de que puedan crecer de manera orgánica mediante la generación de negocio. Un ecosistema en su conjunto que denominamos Hub de Turismo de Andalucía.
Esta comunidad de empresas lleva varios años conformándose, pero en los últimos tiempos se ha acelerado el proceso y, en ferias como Fitur, fueron más de una treintena las empresas que nos acompañaron para establecer contactos y generar oportunidades de negocio
¿Por qué tiene sentido que desde lo público se fomenten este tipo de iniciativas?
Por un lado, Andalucía Lab está consolidado como un punto de encuentro para empresas, sean o no puramente tecnológicas, que ofrecen servicios innovadores y que son un ejemplo de la capacidad del emprendimiento andaluz para crear nuevos productos.
Por tanto, se trata de ayudar a lanzar estos proyectos, contribuir a su consolidación, servir como canal de contacto con otras empresas para abrir vías de colaboración y, en definitiva, impulsar y actualizar todo el tejido productivo alrededor del turismo en Andalucía.
En ese marco de actualización continua un ámbito muy importante es el conocimiento. El centro apuesta por promover la cultura de la innovación facilitando conocimiento útil y práctico a las pymes, profesionales y emprendedores de la industria turística andaluza, especialmente en lo relacionado con la estrategia digital y el uso de las tecnologías de la información y la comunicación.
¿Por qué os habéis centrado en el sector turístico? ¿Os gustaría extender Andalucía Lab a otros sectores? ¿A cuáles? ¿Cómo lo desarrollaréis?
El ámbito de actuación de la Consejería es el turismo, pero, dentro de esta industria, hay muchos ámbitos y campos que se enmarcan en nuestra estrategia. Alojamiento, restauración, transporte, atención al viajero, itinerarios turísticos, generación de propuestas innovadoras, …, todas tienen cabida.
Precisamente, la actividad formativa del Lab se está haciendo más diversa y compleja. En las acciones que se desarrollarán en lo que resta de año se encuentran temáticas tan variadas como promoción y contenido para redes sociales, cursos dirigidos a la ciberseguridad y a comprender riesgos y amenazas cibernéticas, técnicas de ‘Revenue Management’, posicionamiento en buscadores turísticos o comercio electrónico.
Además, muchas de esas empresas que han pasado por el Lab o que estamos ahora atendiendo también extienden su negocio fuera de la industria turística, generando impacto y beneficio en el conjunto de la comunidad.
¿Cuáles son los planes de futuro para este proyecto? ¿Cómo os veis de aquí a cinco años?
La revolución tecnológica e innovadora es tan veloz y sorprendente que es difícil saber con precisión qué ámbitos serán los más relevantes en el futuro, pero la apuesta por Andalucía Lab garantiza que todos esos aspectos serán atendidos.
Tanto el sector privado como el público somos conscientes de la revolución tecnológica en la que estamos inmersos y de que, si no nos adaptamos a esta nueva realidad, estaremos fuera del mercado turístico.
Seguiremos por tanto apostando por el trabajo en red para garantizar la competitividad de esta industria, reuniendo todas las técnicas y herramientas que las empresas e instituciones debemos manejar para generar un modelo de negocio de turismo mucho más sostenible y basado en la innovación y la gestión de los datos.
Número de empresas tech e innovadoras en España
Fuente de datos: Ecosistema Startup, la mayor plataforma de empresas españolas.