Juan Manuel Cotelo: "No me cuentes en qué crees, muéstrame las consecuencias de tu fe"

Juan Manuel Cotelo es un periodista nacido en Madrid que dio un nuevo rumbo a su carrera profesional. Se licenció en Ciencias de la Información por la Universidad de Navarra y comenzó a trabajar en el mundo audiovisual, tanto de guionista como de director de cine.

Tal vez uno de los más grandes desafíos para el hombre de hoy es saber dar razón de sus creencias más profundas. Después del éxito de ‘La Última Cima’, Juan Manuel Cotelo lleva ahora a los cines su nueva película, ‘Tierra de María’, una película tan o más emocionante que la anterior, con un formato especial donde los testimonios de personas reales quedan engarzados en una trama con elementos de ficción.

A pesar de vivir en un mundo lleno de tristeza, violencia, rencor, miedo, etc., la constatación de que hay muchas personas que viven con una gran alegría, paz y valentía, es lo que ha llevado a producir ‘Mary´s Land’.

¿Cuál fue su inspiración para crear este film?

Me pregunté si las claves de la felicidad de las personas tienen que ver con la suerte, o toman alguna receta que pueda ser válida para todas las personas. Descubrí que la fe en Dios es mucho más que una teoría en la que creer o no, sino que las recomendaciones de Jesucristo tienen aplicaciones prácticas que realmente logran transformar a las personas, para bien.

Decidí investigar sin miedo a descubrir la verdad, sobre las consecuencias concretas y prácticas de vivir con Dios, siguiendo las recetas del Cielo. Ésa es la investigación que el personaje del Abogado del Diablo recibe en la película.

La pregunta que deja en el aire “¿Realidad o ficción?”, ¿es un anzuelo para captar al público?

Es el resumen de toda la película, expresado sin tapujos ni disfraces, de modo abierto, para que el espectador sepa antes de entrar a la sala de qué va la película: una investigación valiente, sin disimulo, sobre la verdad de Dios y el hombre. Si descubrimos que todo es mentira, seguiremos viviendo como hasta ahora, sin dios. Pero si encontramos indicios de verdad, ¿tendríamos miedo a cambiar lo que haya que cambiar?

La película trata un tema delicado en estos tiempos, ¿cree usted que puede crear polémica?

No me interesan las polémicas en absoluto, las considero una pérdida de tiempo absurda. Quien quisiera discutir conmigo lo tiene fácil, porque va a ganar sin encontrar resistencia. Y quien convierta la fe en un asunto de debate, se equivoca, sea cual sea su postura. Es un asunto cien por cien práctico, concreto y palpable: no me cuentes en qué crees, muéstrame las consecuencias de esa fe, en tu modo de vivir. Una fe sin obras, es una fe muerta.

De todos los lugares donde se ha rodado esta producción cinematográfica ¿Cuál es el que más le ha llegado al corazón?

En todas partes ha sido muy emocionante, de verdad. Pero destacaría la noche en que filmamos en un barrio peligroso, lleno de prostíbulos, en Guadalajara, México. La experiencia de conocer, de primera mano, a prostitutas y travestis que han experimentado en su vida el amor incondicional de Dios, la cercanía de la Virgen María, expresando ese amor con palabras sencillas y sinceras, fue muy impactante. Hoy llevo conmigo el rosario que me regaló una prostituta, que me lo entregó con un afecto, con una generosidad y elegancia que me conmovieron.

¿Espera que ‘Tierra de María’ tenga más espectadores que ‘La Última Cima’?

Todo queda, desde ahora, en manos de los espectadores, no sólo a nivel externo, estadístico, sino a un nivel más profundo, inconmensurable. No hay aparato para medir el impacto que la película tendrá en cada espectador. Si les convence, les divierte, les emociona y les invita a la esperanza, entonces la recomendarán y se expandirá por el mundo, generando efectos positivos, invisibles, en otros espectadores. Dentro de unos días, empiezo a trabajar en el siguiente proyecto, celebrando lo que suceda con éste, antes de que ocurra.

¿Qué implica como cineasta, como creyente, como profesional, el posible impacto de la película en la vida de las personas?

Es indescriptible. Una mezcla de asombro y de agradecimiento. Una convicción profunda de que Dios se cuela en los corazones, mediante cualquier vía posible (un libro, una pintura, una sonrisa, un gesto, una oración, un sufrimiento, una alegría, un temor...) ¡Todo le vale a Dios, como camino de acceso al corazón de sus hijos! Quien entre a la sala sin cerrar su corazón por completo, puede llevarse la sorpresa de que sale más esperanzado de como entra.

¿Cuál ha sido el efecto que ha tenido en usted la experiencia de recoger testimonios de una decena de personas transformadas por una experiencia con la Virgen María?

Escuchar a estas personas te ayuda a vencer la ceguera. Te ayudan a rezar con susurros, en lugar de rezar a gritos. Descubres que Dios, la Virgen, los santos y los ángeles no están lejos. Basta un instante de intimidad para llegar a su corazón, para permitir que lleguen al tuyo. Si les dejamos habitar solamente en el cerebro, es como si tuviéramos a nuestros seres queridos alojados en la azotea de casa, en lugar de dejarles entrar hasta la cocina.