"El mayor aprendizaje que nos llevamos desde Senniors de la pandemia y que refuerza nuestro modelo es que necesitamos humanizar los cuidados"
Senniors es una startup que reúne a partners healthtech para ofrecer la tecnología y servicios necesarios para el cuidado de las personas dependientes en casa. La tecnología es fundamental en su propuesta de valor. Un aspecto que ha quedado reflejado en dos reconocimientos que ha recibido recientemente la startup. El ‘Innovation in Company Award’ (de la mano de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales), a la mejor startup en el sector InsurTech, y la selección como una de las cinco startups más prometedoras de 2020 por Finnovating.
Claudia Gómez, CEO y co-fundadora de este proyecto, forma parte de las 100 mujeres líderes más influyentes de España en 2020. Se trata de un perstigioso ranking que reconoce el trabajo y la trayectoria de mujeres que están al frente de proyectos sociales, empresariales, humanísticos, innovadores y disruptivos.
Claudia comparte listado con otras mujeres líderes en España como la vicepresidenta del Gobierno, Nadia Calviño; la directora del Centro Nacional de Inteligencia, Paz Esteban; la escritora Almudena Grandes; la directora general para España y Portugal de Google, Fuencisla Clemares y la presidenta del Banco Santander, Ana Patricia Botín.
Senniors nació a finales de 2020. ¿Cómo catapultó la pandemia la idea? ¿Reforzó vuestra idea sobre el valor de los cuidados?
Nosotros llevábamos mucho tiempo preparando el lanzamiento de Senniors, antes de la pandemia. Sin embargo, ésta ha reforzado la necesidad que hay en la sociedad de tener un modelo de cuidados de larga duración, centrado en la persona, progresivo y dinámico.
El envejecimiento y la dependencia no son estáticos; todo lo contrario, son dinámicos y progresivos y, como tal, requieren unos cuidados adaptados a las necesidades específicas que vayan surgiendo en cada etapa. Los cuidados son los que se deben adaptar a la persona y no la persona a los cuidados.
Más de un 95% de los españoles prefiere envejecer en su propia casa. Y, para conseguirlo, es necesario tener un modelo de cuidados en el que se promueva la autonomía de los mayores y se adapten los cuidados en función de la autonomía de cada persona en cada etapa. Desde mi perspectiva, esta es la única forma en la que podemos conseguir que las personas mayores y las personas dependientes puedan permanecer el mayor tiempo posible en su hogar. Se retrasa así la entrada a una residencia, en caso de que su nivel de autonomía les impida seguir viviendo en su casa.
Asimismo, la pandemia ha puesto de manifiesto la necesidad de incluir en el modelo de cuidados actual nuevas tecnologías que nos permitan conectar a los diferentes agentes implicados en el cuidado (cuidadores formales e informales, profesionales sociosanitarios, familiares, etc.) y que nos permitan pasar de un sistema reactivo a uno preventivo y, esperemos, con componente predictivo.
Finalmente, considero que el mayor aprendizaje que nos llevamos desde Senniors de la pandemia y que refuerza al 100% nuestro modelo es que necesitamos humanizar los cuidados.
¿De qué forma habéis evolucionado desde entonces? ¿A qué se debe vuestro rápido crecimiento?
Desde que lanzamos hasta ahora, como cualquier startup, hemos tenido que saber escuchar a nuestros usuarios (las personas que cuidamos, a sus familiares y a los actores implicados en los cuidados) e ir adaptando nuestros servicios a sus necesidades y preferencias reales.
El crecimiento que estamos teniendo es exponencial. En estos nueve meses hemos tenido una facturación bruta de 1.365.000€; pasando de una facturación bruta en enero de 6.000€ a una de 370.000€ en septiembre.
Creo que nuestro crecimiento se debe a diferentes factores: el más importante es que tenemos un equipo excelente, con una calidad humana excepcional y una calidad profesional muy alta. Hemos sabido atraer muy buen talento, con una vocación clara de mejorar la calidad de vida de las personas mayores y personas dependientes. Otro factor determinante en el equipo es que somos muy diversos (somos un equipo intergeneracional, con personas de 20 años hasta más de 60; apostamos por el talento senior y, entre otros, contamos en el equipo en cargos directivos con perfiles de personas mayores de 55 años. Perfiles con formaciones académicas y profesionales muy diversas -sector tech, sociosanitario, etc.; más de la mitad somos mujeres; somos un equipo multicultural, etc.).
Asimismo, otro de los componentes que nos han ayudado a crecer de manera rápida y posicionarnos en el mercado es que tenemos una propuesta de valor compartida con otras empresas y actores del ecosistema. Sabemos que es muy difícil ser el mejor en todo, por lo que nos hemos unido con los mejores de cada área para llevar al mercado una solución conjunta.
¿Cómo ha sido recibida Senniors en el sector tanto emprendedor como médico?
Nos hemos sentido muy bien recibidos. En España hay un ecosistema de impacto social y de salud de primer nivel y la verdad es que nos hemos sentido muy arropados.
Nosotros traemos al mercado una propuesta de valor compartida en la que creemos que entre todos podemos sumar y así lo estamos haciendo.
Entre otros, hemos participado en el programa de Growth Academy: Health & Wellbeing de Google for Startups. El programa nos ha permitido crear y estrechar relaciones con otras start-ups protagonistas del ecosistema emprendedor de salud en España y Portugal y crear vínculos con stakeholders del mundo de la salud.
¿Y entre las familias y los propios usuarios? ¿Qué os hace especiales?
Esta es la parte más bonita de nuestro trabajo. El trabajo que hacemos nos permite ver día a día el impacto real que estamos teniendo en las personas que cuidamos y sus familiares. Podemos palpar de primera mano cómo estamos ayudando.
Nosotros proponemos un modelo de ‘salud conectada’, bajo la metodología de Atención Centrada en la Persona. El objetivo es acompañar al paciente de forma personalizada en la evolución de enfermedades como el Alzheimer y otras demencias, Parkinson, Ictus, ELA, patologías osteoarticulares, entre otras; mejorar su calidad de vida, reducir el número de visitas al hospital, prevenir problemas graves de salud, y ayudar a los médicos y a los familiares a seguir la evolución de la persona cuidada.
Para ello, tenemos un equipo propio de Neuropsicología especializado en geriatría y bienestar emocional que crea un programa integral personalizado de cuidados, en el que se tiene en cuenta, además de la patología y fragilidad del paciente, parámetros como: quién es la persona, qué gustos y aficiones tiene, cuál es su historia personal, qué situación familiar y social presenta, qué capacidades y limitaciones físicas, cognitivas y funcionales tiene, cómo se siente, etc.
El mercado español está muy fragmentado. Por ejemplo, una persona tras sufrir un ictus tiene que acudir por separado al neurólogo, al fisioterapeuta, al logopeda, al neuropsicólogo, al terapeuta ocupacional; contratar un cuidador profesional, adquirir ayudas técnicas, etc. Y, además, sus necesidades van variando con el paso del tiempo.
Esto es abrumador para el paciente y sus familias. A través del Ecosistema de Senniors, las familias tienen asignado un único interlocutor (un coordinador social -un profesional del ámbito sociosanitario) que se convierte en su referente, acompañándolas y guiándolas a través de todo el proceso. Este coordinador social prepara un plan de cuidados en el que se le van facilitando al paciente los servicios que va necesitando en cada momento de manera coordinada.
Creo que uno de los aspectos que más valoran las familias es esta cercanía y seguimiento profesional por parte de un coordinador social que tiene un equipo multidisciplinar detrás.
¿Cómo se humaniza la tecnología? ¿Por qué es tan importante que se haga y se reivindique?
Efectivamente, en Senniors humanizamos la tecnología y reivindicamos que se haga. Hoy en día la tecnología es un pilar fundamental para poder cuidar, pero es necesario humanizarla.
Hay un artículo de Jacinto Bátiz titulado La compañía, una buena medicina, que me gusta mucho, en el que dice: "El acompañamiento más íntimo que necesita quien se está muriendo es el de otro ser humano. Cuando atendemos a enfermos graves que se encuentran en su fase final, nos damos cuenta de que necesitan algo más que la ciencia que les podemos administrar: necesitan acercamiento humano, necesitan compañía, necesitan no estar solos".
Y ésta es precisamente la filosofía de Senniors. Las personas mayores y las personas dependientes necesitan cercanía, la complicidad, el cariño, el calor humano. Necesitan una caricia, un abrazo, un ‘¡qué guapa estás!’.
En este equilibrio de prestar unos cuidados sociosanitarios de primer nivel, profesionales, cercanos y humanos, apalancándonos en tecnología puntera, está nuestra esencia. En saber poner la tecnología al servicio del cuidado y no al revés.
Desde Senniors tenemos la convicción de que la digitalización en el ámbito de los cuidados domiciliarios es fundamental, especialmente con los aprendizajes que nos llevamos de la pandemia, pero ésta no tiene sentido sin el factor humano.
En definitiva, la tecnología se humaniza, precisamente siendo más humanos.
¿Cuáles son esos aspectos tecnológicos que os definen? ¿Cómo se reflejan en la calidad de vida de las personas?
Desde Senniors hemos creado el primer ecosistema de salud digital en torno a las personas dependientes. Nuestro objetivo es aunar en una misma plataforma todos los servicios y cuidados necesarios tanto para el paciente -como para sus familiares- en cada fase de la enfermedad.
La tecnología juega un rol fundamental en Senniors, tanto en la cara que ve el usuario y su familia, como a nivel de operaciones de la compañía.
Por ejemplo, después de que el equipo de Neuropsicología y bienestar emocional realice el programa de cuidados que se va a seguir, procedemos a seleccionar, entre más de 20.000 profesionales sociosanitarios, al cuidador que lo va a llevar a cabo desde el domicilio del propio paciente. Para ello, hemos desarrollado un algoritmo de matching y un sistema de scoring que nos permite ordenar a los cuidadores por orden de compatibilidad profesional y personal. Después, el equipo de Neuropsicología valida que el match realizado a través de la solución tecnológica sea el óptimo y presenta al cuidador el programa que se va a llevar a cabo.
Senniors convierte al a los coordinadores sociales y a los cuidadores en ‘los ojos del profesional sanitario en el domicilio’, siendo las personas que están en contacto continuo con el dependiente, facilitando la monitorización de los parámetros de salud a través de los diferentes dispositivos y ayudando a minimizar el impacto degenerativo que tienen estas enfermedades en las personas dependientes.
En nuestra plataforma estamos reuniendo a distintos partners del sector healthtechpara ofrecer toda la tecnología y servicios necesarios para el cuidado de las personas dependientes en casa.
Para la telemonitorización, colaboramos con HumanITcare. Gracias a ésta, se puede controlar la salud del paciente a través de diferentes dispositivos (termómetro conectado, glucómetro, dispositivo de presión arterial, oxímetro de pulso, wearables, báscula inteligente, entre otros). Con ellos, pueden hacer un seguimiento del tiempo y la intensidad de las actividades físicas, de la frecuencia cardíaca, de la temperatura corporal, de la presión arterial o el oxígeno en los niveles sanguíneos, del nivel de glucosa en sangre, etc. Parámetros que, en función de la patología que padezcan, puede ser muy útil conocer.
Todos los dispositivos se conectan de forma automática a la plataforma, certificada como producto sanitario, que transforma los datos recopilados en información relevante en relación con la salud y bienestar del usuario. Además, se notifica si hay algún parámetro más alto o bajo de lo normal para ese caso concreto.
Por otro lado, Senniors también colabora con Docline para ofrecer servicio de telemedicina que incluye el acceso a: video consultas (pueden ser a tres o más bandas, en las que se conecta el paciente y el cuidador, el familiar y el médico), y receta electrónica privada.
A nivel de inversión, además de con un Enisa, ¿con qué apoyos habéis contado?
Además de un ENISA contamos con el respaldo de inversores en el ámbito nacional e internacional.
¿Qué importancia tienen estas inversiones en la etapa en la que os encontráis? ¿De qué forma os está haciendo avanzar?
Estas inversiones nos están ayudando a crecer de manera más rápida que si tuviésemos un crecimiento orgánico. Nos están permitiendo poder atraer talento de primer nivel e invertir en tecnología.
¿Está entre vuestros objetivos la expansión? ¿Qué planes tenéis en este sentido?
Actualmente tenemos oficina en Madrid, Barcelona y Málaga. Por el momento vamos a seguir afianzando estos tres mercados y cuando estén más consolidados continuaremos abriendo nuevos mercados en el ámbito nacional.
Claudia, ¿qué supone haber sido seleccionada entre las 100 Mujeres Líderes en España? ¿Qué le dirías a aquellas mujeres que aún no se animan a emprender?
Haber sido seleccionada entre las 100 Mujeres Líderes en España ha sido un auténtico honor, sobre todo conociendo el altísimo nivel que hay en España.
Asimismo, haber sido seleccionada en un contexto como el actual, marcado por la COVID y la mella que ha dejado y sigue dejando en las personas mayores y dependientes, me ha llegado al corazón. Este galardón lo he tomado como un reconocimiento al emprendimiento social, a que sectores tan tradicionales como el de los cuidados domiciliarios todavía se pueden seguir revolucionando y a que se puede emprender cambiando las reglas del juego.
A aquellas mujeres que aún no se animan a emprender les diría que si realmente tienen el gusanillo de emprender que se lancen a hacerlo, nunca hay un mejor momento como el presente. Emprender es muy satisfactorio, pero también hay que saber convivir con la incertidumbre y ser conscientes del sacrificio personal que conlleva. Mi último consejo sería que emprendas en un campo que te apasione y que te permita impactar positivamente.
Para mí poder contarle a mis hijos que estoy mejorando el mundo, no tiene precio.
¿Qué supuso para ti este paso? Ahora que estás en el camino ¿A dónde más te gustaría llegar?
Yo creo que soy una emprendedora nata. Desde pequeña he tenido alma emprendedora y ahora se ha materializado en Senniors.
Me gustaría seguir afianzando Senniors, ayudando a más personas mayores y dependientes a poder seguir viviendo en su propia casa con la mejor calidad de vida y salud.
Asimismo, me gustaría poder inspirar a más mujeres, niñas y jóvenes; que vean más referentes femeninos (Senniors es la única empresa del sector liderada por una mujer en España) y normalizar el poder ser madre antes de los 30 y ser emprendedora.
Número de empresas tech e innovadoras en España
Fuente de datos: Ecosistema Startup, la mayor plataforma de empresas españolas.