"Aquactiva produce un desinfectante universal que elimina patógenos en menos tiempo, con mayor amplitud y con mucho menos impacto"

AquActiva Solutions tiene como misión proveer soluciones eficientes y rentables al sector agropecuario y agroalimentario. Su trabajo se basa en tecnologías sostenibles e innovadoras en la desinfección del agua y el saneamiento e higiene ambiental. Así, la solución aquactiva permite reemplazar hasta 90% de los desinfectantes y detergentes químicos de síntesis utilizados por las industrias agroalimentarias y tratamiento del agua por unos productos totalmente inocuos, altamente eficientes y rentables, producidos in-situ y con certificado ecológico. En el tratamiento del agua la tecnología aquactiva permite reducir y eliminar los compuestos tóxicos derivados (cloraminas, cloratos, trihalometanos, etc.). 

La tecnología aquactiva es un sistema único y patentado de desinfección y limpieza in-situ ecológica, 100% inocuo, altamente eficiente frente a todo tipo de patógenos y muy rentable. La compañía produce un desinfectante y detergente únicamente partiendo de agua, sal (5g/L) y electricidad (15W/L).

La idea nació de un proyecto europeo (Climate-KIC Pioneers into Practice) que selecciona expertos en cada sector para afrentar el cambio climático y encontrar nuevas soluciones y proyectos. José Castro (CEO) y Grégoire Gaume (CTO) se conocieron en este ámbito en 2015 y tras varias entrevistas a posibles usuarios finales, decidieron lanzar el proyecto. 

Para ellos lo más importante a la hora de constituirse fue compartir "la misma pasión y visión del proyecto". Y confiensan: "La pasión es lo que nos animó y la visión conjunta es lo que nos mueve a todos hasta en los momentos difíciles para seguir adelante. De hecho, fue uno de los primeros ejercicios que hicimos como equipo: compartir nuestras visiones individuales hasta conseguir una conjunta que nos apasionara a todos". Gracias a este entusiasmo la empresa sigue adelanete con el objetivo continuar sus proyectos pilotos y terminar instalando su solución dentro del sector.

Aseguráis que sois una alternativa más eficiente y rentable frente a otras tecnologías, ¿por qué? ¿Qué características os otorga esta distinción?

La tecnología aquactiva es más eficiente porque produce un desinfectante universal quien puede eliminar todo tipo de patógenos (virus, bacteria, hongos, esporas, moho, etc.) en menos tiempo, con mayor amplitud y con mucho menos impacto en el medio ambiente y salud humana que las otras tecnologías de desinfección. Por ejemplo, para la bacteria E. Coli, puede reducir su concentración de log8 en 10 segundos sin dejar productos derivados tóxicos en el agua tratada, cuando la mayoría de las tecnologías necesitan varios minutos para lograr una reducción inferior y dejando productos derivados tóxicos (p.ej. cloratos, cloritos, bromatos, THMs, etc.).

Además, los costes de producción son de los más económicos del mercado:  el coste para producir el desinfectante aquactiva es inferior a 0,02€/L producido - 1L de desinfectante aquactiva puede tratar hasta 1m3 de agua. Eso hace que la tecnología aquactiva es muy rentable: entre 6 y 24 meses dependiendo del sector.

Las aplicaciones de Aquactiva son muy diversas y en diferentes campos, ¿con qué apoyos habéis contado en cada uno de ellos para desarrollar vuestra solución?

Para empezar, nos hemos centrado en los sectores del Tratamiento de Agua y Agroalimentario.

En el tratamiento del agua hemos contado con el apoyo de la empresa FACSA, referente en gestión del agua, para hacer un proyecto piloto en una EDAR (Planta de tratamiento de aguas residuales) en Murcia que ha acabado en febrero 2018 y nos ha validado los beneficios de la tecnología. Nos han pedido ya oferta y deberían comprarnos una instalación aquactiva en breve. Estamos ahora siguiendo la colaboración con FACSA para hacer otro proyecto piloto en una ETAP (Planta de tratamiento de agua potable) en Castellón. El piloto ha empezado en marzo 2018.

En el sector Agroalimentario, hemos realizado un proyecto piloto el año pasado en una empresa en Gandía (JUMEL) que produce salsas y mermeladas, nuestro primer cliente. Hemos validado los beneficios (para procesos de limpieza CIP: 100% reducción de los productos químicos, 40% reducción en el consumo en electricidad y agua, 50% reducción de tiempo de maniobra, eliminación de los riesgos para la salud humana y medio ambiente). Nos han pedido una instalación la cual está en funcionamiento desde finales de 2017. Estamos ahora siguiendo realizando un proyecto piloto en Zaragoza en una empresa referente en productos cárnicos quién tiene gran interés en adquirir nuestra tecnología para todos los procesos de desinfección y eliminar la mayoría de sus productos químicos.

¿Cuál es vuestro ámbito de actuación territorial? ¿Tenéis pensado expandiros?

Nuestro primer foco es para la comunidad de Valencia. Pero ya tenemos interés y ofertas para el resto de España y otros países. Tenemos distribuidores en las islas baleares, en Argelia (una de las principales empresas del sector Agroalimentario) y en Qatar. En Qatar estamos trabajando con la agencia nacional del tratamiento del agua quien nos ha pedido una oferta para plantas de tratamiento de agua potable de gran escala (500.000 m3/día) y estamos pendiente para hacer un proyecto piloto allí en abril de 2018.

¿Cómo adaptáis vuestro producto según en qué país os instaláis? Según este criterio, ¿también podrían existir nuevas aplicaciones?

La tecnología de producción del desinfectante aquactiva siempre es la misma. Lo que cambia es la instalación y manera de aplicar el desinfectante. No se adapta en función del país, sino en función de la aplicación que se quiere dar. También pueden existir nuevas aplicaciones en función de las necesidades de cada cliente. Por ejemplo, en Qatar tienen un gran problema con la salmuera producida de las grandes plantas de desalinización. Después de haber recibido esta solicitud de la Agencia nacional de tratamiento de agua de Qatar, estamos ahora adaptando nuestra tecnología para poder reutilizar esta salmuera para usarlo como materia prima de nuestra tecnología (la tecnología aquactiva necesita como entrada: agua, sal y electricidad).

¿Qué dificultades tiene una startup como la vuestra a la hora de financiarse? ¿Notáis diferencia con las de otras áreas de actuación?

Al trabajar con una tecnología novedosa y todavía desconocida, tenemos que invertir mucho en hacer proyectos de demostración, visitas comerciales, participación en ferias, imagen, comunicación y diseminación, etc. Eso supone un coste importante que tenemos a asumir. Hasta ahora nuestras fuentes de financiación han sido: ayudas de aceleradoras (Climate Kic) y financiación propia de los socios.

¿Qué ha supuesto para vosotros haber sido acelerados por Climate-KIC ?

Climate-KIC ha sido un gran apoyo para nosotros tanto al nivel de definición de las métricas, de política comercial y apoyo financiero. Gracias al programa, hemos podido centrarnos en el sector donde más potencial tiene la tecnología para entrar en el mercado. También hemos podido realizar varios proyectos piloto con contactos proporcionados a través el programa, participar al salón internacional más importante del sector Agroalimentario en Madrid, y validar las hipótesis que hemos establecido, entre otros.

¿Qué importancia creéis que tienen estas iniciativas?

Estás iniciativas son muy útiles para orientar nuevos proyectos y empresas y darles las herramientas mínimas para que puedan defenderse en el mercado. De esta manera se reduce considerablemente el riesgo de fracaso, aunque, todos sabemos que los errores que son bienvenidos para aprender y seguir adelante.

Además, al enfocarse en soluciones sostenibles para luchar contra el cambio climático es de suma importancia acelerar estos tipos de proyectos para que tengan un impacto significativo en nuestra sociedad.

¿Qué objetivos os habéis marcado para 2018?

Hemos pedido una financiación IVACE quien no va a permitir realizar un máximo de proyecto pilotos. Tenemos como objetivo realizar 8 nuevos proyectos pilotos con las 2 máquinas de demonstración que tenemos actualmente, vender 5 instalaciones y una cifra de negocio de 150K€ y conseguir llegar a cuatro nuevos distribuidores entre España y otros países.

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