"A la gran empresa se le puede asesorar en ocasiones como a una startup y viceversa"
Code Abogados se define como un despacho de abogados 360º. Gerardo Siguero y Ricardo Torres son los fundadores de este proyecto pionero en el mundo startup y venture capital en el sur de España; en esta región se posicionan prácticamente como el único operador jurídico especializado. "Si bien nuestro ámbito de trabajo es nacional, nos gusta poner en valor nuestras raíces en el sur de España", aseguran.
Los dos socios se conocieron en la facultad y, tras un tiempo de trabajo en otros despachos, en Madrid y Sevilla, decidieorn formar Code Abogados (entonces con otro nombre) en 2006. El proyecto surgió por sintonía y entendimiento entre los socios y por las ganas de un proyecto propio y distinto.
A día de hoy el despacho asesora a los clientes corporativos desde todos los ámbitos, cerrando el círculo del emprendimiento desde el inicio de la startup hasta su final, ya sea este productivo, exit, o improductivo, concursal o liquidación. El equipo de Code apoya a las compañías en la constitución y financiación de proyectos y en las mejores prácticas de gobierno corporativo, formando parte de los consejos de administración como secretarios o como letrados asesores y; llegado el caso, elaborando todo tipo de estrategias societarias de ataque, defensa y solución de conflictos societarios en situaciones de conflicto.
Ahora que son un depsacho asentado, entienden que la experiencia emprendedora "no es solo positiva desde el punto de vista personal para el que emprende, sino para toda la sociedad, dado que por el camino se han creado empleos, pagado impuestos, y desarrollado tecnología". E insisten que "si bien solemos valorar al emprendedor de manera individual por lo consigue, debemos también valorar de manera colectiva, como sociedad, la importancia de contar con emprendedores que quieran cambiar paradigmas y el contagio de su espíritu emprendedor al resto de la sociedad".
¿Por qué os centrasteis en el ecosistema startup?
Nuestro despacho abarca múltiples ramas, pero el sector del ventura capital/ startup es bastante importante en el mismo. Nos centramos en el sector porqué entendíamos que había necesidad de un asesoramiento especializado, especialmente en el ámbito corporativo y financiero. Si bien había, y hay, grandes nombres en el sector jurídico, pensamos que era necesario un acercamiento distinto al que existía, dado que la industria aún no está lo suficientemente madura y las compañías emergentes tienen una demanda importante de servicios corporativos. Desde el lado personal, la realidad es que soy un apasionado de aprender cosas nuevas y del venture capital.
¿Cómo os habéis preparado para atender a sus necesidades?
Como socio responsable del área de Venture Capital he preparado el despacho y a sus profesionales para ello, acudiendo a formación especializada en Estados Unidos, y en España, sobre Venture Capital, finanzas corporativas, derecho societario internacional tecnología, y start ups. Entender cómo funciona el ecosistema en Estados Unidos es básico para ejercer un asesoramiento corporativo y financiero adecuado, dado que son ellos los que han creado esta industria. El enfoque internacional de la materia es cada día más importante, incluso en operaciones y startups pequeñas al principio.
¿Por qué es importante que cuenten con un despacho de abogados especializado? ¿Suelen ser conscientes de este punto?
Cada industria y cada sector tiene su particularidad, la industria del venture capital y la inversión en startups tiene su propio lenguaje y sus propias normas no escritas o estándar de la industria. De ahí surge la necesidad de que el asesoramiento lo presten despachos que conozcan la industria y el ecosistema. Normalmente, la mayoría de emprendedores son conscientes de esto, aunque, como siempre, hay excepciones, derivadas de la falta de conocimiento del propio emprendedor.
¿Cuáles son los errores más habituales que pueden acarrear mayores consecuencias y que tratáis habitualmente?
El error más grave que se puede cometer es que las operaciones, deals y el asesoramiento en general sean realizadas por gente externa a la industria, dado que puede hacer que las consecuencias sean desastrosas para el emprendedor y para la propia compañía. Como indicaba anteriormente esto sucede normalmente por desconocimiento del equipo fundador.
¿Qué diferencias encontráis (a nivel personal y profesional) entre la asesoría a este tipo de empresas y otras más ‘convencionales’?
La principal diferencia a nivel profesional es la estrategia y el objetivo de cada uno. Una inversión en una startup es una operación financiera, en ocasiones los propios fundadores no tienen claro esto, lo cual determina toda la vida de la compañía y el enfoque y la misma, haciendo además que el grado de profesionalidad, aún en compañías muy pequeñas, de invertidas por la industria del venture capital sea muy alta. La estrategia, y el objetivo, de las empresas con crecimientos convencionales, son completamente distintas.
A nivel personal, las empresas innovadoras exigen flexibilidad, disponibilidad y que les acompañes en el viaje.
¿Cómo es este ecosistema en Sevilla? ¿Qué le hace especial?
El ecosistema en Andalucía no es esencialmente distinto del que puedas encontrar en Madrid o Barcelona, el resto de España está conectado a los grandes hubs. Quizá destacaría que Andalucía es un gran sitio para montar empresas innovadoras, existe mucho talento, precios muy contenidos y ganas de crear cosas nuevas. Los fondos de venture Capital ya han descubierto que aquí hay proyectos invertibles.
Sois uno de los pocos asesores en este sector en la región, ¿qué os ha hecho destacar sobre otras iniciativas?
Nuestro grado de profesionalidad, y conocimiento de la industria, es superior a los de la competencia.
¿Qué es lo que dicen vuestros clientes, qué valoran de Code Abogados?
Es una pregunta que habría que hacerles a ellos. Yo destacaría nuestra cercanía, apoyo, entendimiento de sus problemas y nuestra relación con el mundillo del emprendimiento.
¿Cuál es vuestra relación con otros agentes del ecosistema?
Tenemos clientes en toda España, y conocemos a la mayoría de los operadores a nivel nacional. Nuestra relación es positiva con todos ellos.
¿Cómo combináis vuestros servicios a startups y a grandes corporaciones?
Para nosotros los servicios son transversales, a la gran empresa se le puede asesorar en ocasiones como a una startup y viceversa. Los dos tipos de asesoramiento jurídico, empresa emergente y empresa consolidada, deben ir de la mano, ya que aunque suelen tener problemas distintos, es enriquecedor para ambos y tienen muchos puntos de conexión. Las startups suelen estar en un entorno que les hace creer que todo en su mundo jurídico es distinto, y no es así, comparten la misma normativa que el resto de sociedades.
¿Qué implicaciones tiene que seáis parte de la Asociación Nacional de Capital Riesgo?
La Asociación nacional de Capital Riesgo (ASCRI) es un punto de encuentro para el sector y una fuente de información imprescindible. Sus reportes e informes son la base del capital riesgo nacional, creando un punto de encuentro entre la industria y los profesionales que la componen. Formar parte de ASCRI es imprescindible para estar al día de las novedades de la industria del capital riesgo y de su evolución, para nosotros es fundamental si se quiere estar en el mundo de la inversión profesional.
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