Vammo recauda 30M$ en una ronda de inversión Serie A liderada por Monashees

Vammo, la startup con sede en São Paulo y centrada en ingeniería de movilidad eléctrica, ha recibido una inversión de 30 millones de dólares en una ronda de financiación Serie A. La operación ha estado liderada por la firma de capital riesgo Monashees, una de las más activas en el ecosistema startup latinoamericano.

Vammo quiere ampliar el intercambio de baterías de motocicletas eléctricas en América Latina, donde se está viviendo un aumento exponencial del uso de este tipo de vehículos. La empresa fabrica modelos de motos eléctricas, ofrece estaciones de recarga y servicios de recambio de baterías.

La startup, fundada a comienzos de 2022 como Leoparda Electric por un grupo de emprendedores, también ofrece un modelo de suscripción al vehículo eléctrico que incluye acceso ilimitado a estaciones de intercambio de baterías. La startup se quiere convertir en un referente de la transformación que está viviendo el sector de la movilidad, conquistando un mercado con gran potencial como es el brasileño. De momento, en los 10 meses transcurridos desde el lanzamiento de sus baterías, ya ha comercializado más de 150.000 cambios.

Además de Monashees, esta nueva inyección de capital - que también engloba una parte de deuda - ha contado con la participación del fondo de tecnología climática 2150 y Maniv Mobility, y ayudará a Vammo a escalar en todo Brasil en el corto plazo. Para 2025, Vammo pretende multiplicar por 50 su base de clientes y expandirse a otros países latinoamericanos, empezando por Colombia y México.

Otra ventaja comercial con la que cuenta Vammo es que su hardware y software de batería patentado es compatible con una amplia variedad de modelos de diferentes marcas, como Niu y Super Soco. La startup cuenta actualmente con ocho estaciones de intercambio de baterías ubicadas en São Paulo, que son operadas por un empleado de Vammo.

La startup tiene la intención de implementar alrededor de 250 puestos de intercambio de autoservicio para 2025, donde los clientes puedan cambiar las baterías agotadas por otras cargadas en menos de dos minutos. La empresa prevé que estos espacios se conviertan en el estándar en toda Latinoamérica.