Vargas Llosa: "El nacionalismo es una tara de la que es muy difícil librarse"
Mario Vargas Llosa, premio Nobel de Literatura 2010, ha presentado esta mañana en La Casa de América su nueva novela: “El héroe discreto”, que será publicada mañana. Algunos escritores y celebridades han calificado esta nueva obra como “profundidades del alma de personas muy distintas”, “paternidad” o “moralidad como resultado final”.
Un muy cercano y afable Vargas Llosa ha querido hacernos partícipes de cómo se gestó esta nueva novela, la primera que escribe desde que recibiera el premio Nobel de Literatura 2010. Asegura que las experiencias personales jugaron un papel muy importante en su creación, ya que “la imaginación no trabaja en abstracto, sino a partir de imágenes que la memoria ha captado; imágenes de experiencias vividas. Porque la imaginación y la fantasía son el corazón de la ficción”.
Recordaba Vargas Llosa haber leído o oído algo ocurrido en Trujillo (Perú), donde un humilde empresario hizo saber al pueblo que no aceptaría los chantajes de la mafia, y que estaba dispuesto a enfrentarse a ellos, sabiendo que sacrificaba muchas cosas, ya que lo que estaba en juego era un principio moral, religioso o cívico. Al mismo tiempo, Perú está viviendo un proceso de desarrollo, donde la política económica de apertura ha generado un crecimiento económico, y con ello un crecimiento de clases medias y la aparición de empresarios de clase muy humilde. De aquí surge la idea, y este es el contexto en el que se desarrolla la historia de Felícito Yanaqué, personaje protagonista de la novela. Aunque al principio solo existe la historia de un solo personaje y su familia, surge más adelante otra nueva historia complementaria. Dos historias separadas que poco a poco van uniéndose hasta formar solamente una. “En casi todas mis novelas tengo la necesidad de juntar siempre más de una historia. He sentido la posibilidad que tiene toda historia de convertirse en un laberinto de historias. Cuando una novela está lograda, esa novela nos hace sentir la posibilidad de lo infinito, de que esta historia no tiene fin”. Vargas Llosa no duda en asegurar que a veces para él es más difícil terminar una historia que empezarla.
CONSECUENCIAS NEGATIVAS DEL DESARROLLO ECONÓMICO
El escritor peruano ha querido resaltar algunos de los problemas que aparecen con el desarrollo económico y a los que sus protagonistas tendrán que hacer frente. En primer lugar, hablaba Vargas Llosa del incremento de la violencia urbana y la aparición de las mafias, chantajes,… que “son consecuencia de la corrupción, que es el gran problema que vive América Latina. La corrupción amenaza el desarrollo económico, destruye las instituciones y alimenta la idea destructiva de que todo el mundo es corrupto”.
Ligado a este problema nos encontramos con “la decencia”. Explicaba Vargas Llosa que “a veces la situación negativa que vive una sociedad nos empuja al pesimismo, nos olvidamos de que en todas las sociedades existe gente decente que lucha por sus valores, que no acepta ser chantajeado por delincuentes. Estos son los héroes anónimos, los que nunca salen en televisión ni en las portadas, pero son los que hacen que progrese una sociedad”.
NACIONALISMO Y CLASES POLÍTICAS
Vargas Llosa, que entre risas ha asegurado que su editora y su mujer le tenían prohibido hablar de política durante la presentación de su novela, ha respondido a la pregunta que le ha realizado uno de los periodistas sobre el debate existente entre Cataluña y España “de forma literaria”. Tomando como punto de partida la Globalización, que ha calificado como “una situación fascinante” aunque en ocasiones tenga efectos negativos, se ha referido a las tribus explicando que “salir de la tribu es el inicio del progreso de la civilización. Gracias a eso hay democracia. Pero el llamar de la tribu es algo muy fuerte, ya que supone volver a formar parte de una comunidad.El nacionalismo es ese regreso a la tribu”. “He combatido siempre el nacionalismo, los millones de muertos son consecuencia de ese nacionalismo; ocurrió en Alemania y en Japón. Es una tara de la que es muy difícil librarse. La cultura es una de las grandes herramientas que tenemos para combatir esas taras”.
En cuanto a la política ha resaltado que aunque en las clases políticas hay mucha mediocridad, mucha corrupción, no podemos condenar a todos los políticos a eso, “creo que entre los políticos hay gente muy decente, muy brillante y muy valiosa”. “Las sociedades tienen a las clases políticas que se merecen. Hay sociedades que rehúyen la política, por ello a veces las mejores personas no quieren hacer política, porque es un mundo muy difícil. En todas las sociedades hay buena gente que trabaja y lucha para sacar adelante a sus hijos, pero esa buena gente no llega nunca a dirigir el país”. Por ello “Para el progreso de una sociedad es necesario que haya esos héroes discretos”.
LA VEJEZ
Vargas Llosa se ha despedido recalcando lo importante que es vivir con ilusión, con entusiasmo, “lo importante es vivir como si uno fuera inmortal”. Asegura el novelista que escribir le ayuda mucho a abolir ese paso del tiempo, ya que anula la preocupación por la extinción, por el final. “Me gustaría mucho morirme escribiendo, con la pluma en la mano. Hay que vivir hasta el final”.
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