Aprendices Visuales, la tecnología al servicio de los niños con autismo
Actualmente ofrecen sus servicios bajo licencia Creative Commos, lo que permite la personalización de la herramienta según las necesidades de cada niño
Aprendices Visuales es una de las primeras "tech non-profits" en España, organizaciones de base tecnológica y sin ánimo de lucro. Desde la startup han diseñado un método de enseñanza visual a través de cuentos y aplicaciones interactivas para que familias y profesionales puedan enseñar habilidades sociales, emocionales y de autonomía en la infancia. Sus herramientas están disponibles en cinco idiomas y las utilizan más de un millón de niños en todo el mundo, con especial énfasis en ayudar a niños con autismo y otras dificultades de aprendizaje.
Su fundadoras son Miriam Reyes y Amélie Jézabel. Miram es Licenciada en Arquitectura con un Máster en comunicación y Emprendedora social. Trabajó en el estudio de arquitectura suizo Herzog & de Meuron, y, tras el diagnóstico de autismo a su primo, decidió fundar Aprendices Visuales y cambiar el diseño de edificios por el diseño de herramientas que ayudaran a estos niños a desarrollar su potencial. Amélie, por su parte, es Directora y co-fundadora de Aprendices Visuales. Estudió Economía y Derecho entre Francia, Reino Unido y España. Con un Máster en Periodismo por la Universidad Europea y formada en Emprendimiento Social en el INSEAD. Es Youth Advisor de Melinda & Gates Foundation y su trayectoria ha sido recientemente reconocida como Fellow por la Fundación del Premio Nobel de Paz, Muhammad Yunus.
EL INICIO DE UN SUEÑO
Aprendices Visuales empezó cuando diagnosticaron autismo al primo pequeño de las fundadores. "Empezamos a preguntar a psicólogos y a expertos cómo podíamos ayudarle, y nos dijeron que los niños con autismo son Aprendices Visuales, que necesitan imágenes y pictogramas para aprender mejor", cuentan. Fue así como crearon para él un primer cuento con pictogramas para que aprendiera a ir solo al baño y que se llamaba El calzoncillo de José. Fue al colgarlo en internet cuando empezaron a escribirles familiares y profesionales para darles las gracias por haberlo compartido. Esa fue la semilla para que naciera Aprendices Visuales.
Actualmente ofrecen sus servicios bajo licencia Creative Commos, lo que permite la personalización de la herramienta según las necesidades de cada niño. Se trata de un diseño centrado en el aprendiz, en el que ha colaborado un equipo multidisciplinar de personas.
PREMIO A LA SOLIDARIDAD
El modelo de Aprendices Visuales ha ido evolucionando a lo largo de los años, según las necesidades del proyecto. Actualmente, tienen patrocinadores para el desarrollo de sus cuentos y aplicaciones gratuitas, y los usuarios pagan si quieren recibir formación online.
Además están trabajando para desarrollar un algoritmo que ofrezca un itinerario de aprendizaje personalizado a cada familia o profesional, según el perfil del niño. En 2018, quieren formar a 10.000 profesionales y llegar a 100.000 niños más con sus cuentos y aplicaciones interactivas. "El sueño, llegar a los 64 millones de niños con autismo en el mundo", confiesan.
Su labor ha sido premiada con más de 20 galardones nacionales e internacionales. En 2015 fueron destacadas como una de las innovadoras españolas por el MIT, Massachusets Institute of Technology, en 2016 seleccionadas en la lista Forbes30Under30 y, recientemente, hemos recibido el Premio Princesa de Girona.
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