"Nuestra solución supondrá una mejora en la calidad de vida no solo de los pacientes, sino también de sus familias"

Limnopharma es una empresa biotecnológica especializada en el desarrollo de nuevas terapias para el tratamiento de diversas enfermedades de la retina.
El primer producto desarrollado por Limnopharma (LIM21) es un compuesto de naturaleza fenólica con efectos neuroprotectores y antinflamatorios para el tratamiento de Retinosis Pigmentaria (RP). Su principal ventaja es que se administra tópicamente a través de gotas, lo que supone una gran ventaja respecto al único tratamiento disponible en el mercado (Luxturna). Esta terapia génica es administrada como inyección subretiniana. La segunda gran ventaja de LIM21 es que va dirigido a cualquier paciente de RP, mientras que Luxturna únicamente está destinado para pacientes con una mutación genética concreta (RPE65). Además, LIM21 ha demostrado eficacia en modelos animales de degeneración macular relacionada con la edad (DMAE) con administración en gotas.
A día de hoy, alrededor de 253 millones de personas viven con discapacidad visual en todo el mundo. La RP, junto con la DMAE y la retinopatía diabética (RD), producen deterioro de la visión y ceguera. Afectan a un segmento significativo y creciente de la población, tienen pocos o ningún método de tratamiento y son costosos de tratar. Por eso el primer producto está indicado para los 2 millones de pacientes con RP, una enfermedad rara, a nivel mundial.
Toda su innovación se ha visto recompensada recientemente: la compañía ha sido nombrada una de las ganadoras de Startup Andalucía Roadshow. Esta iniciativa desarrollada por la Consejería de Transformación Económica, Industria, Conocimiento y Universidades de la Junta de Andalucía y el Consejo Andaluz de Cámaras de Comercio tiene como objetivo contribuir a que las mejores startups andaluzas escalen, crezcan y encuentren financiación.
¿Qué implicaciones tiene nacer como una spin off del CSIC y la Fundación Progreso y Salud?
Ser una spin off del CSIC y la FPS implica el reconocimiento de la Ciencia de calidad que se hace en estas instituciones. CSIC y FPS son propietarias de las patentes surgidas de la investigación ciencia que ha permitido la creación de Limnopharma. Estas patentes están licenciadas en exclusiva por Limnopharma, de modo que CSIC y FPS son compañeros en el viaje de Limno. Con ambas instituciones, además, se colabora estrechamente, siendo receptoras de contratos de investigación que Limno firma con ellos para continuar con la Ciencia detrás de nuestra tecnología.
¿Cómo os especializasteis en enfermedades de la retina?
Los fármacos que desarrollamos tienen propiedades antiinflamatorias y antioxidantes, con capacidad neuroprotectora. Los fotoreceptores, células localizadas en la retina, son neuronas y por ello probamos la actividad de nuestros compuestos en enfermedades que suponen una degeneración de los fotoreceptores. Existen modelos experimentales muy establecidos para probar estos fármacos y, el ojo, al ser un compartimento estanco, es un órgano relativamente sencillo para el desarrollo de fármacos. Por supuesto, la alta incidencia de estas enfermedades, así como el escaso tratamiento que actualmente existe, hacen que buscar una solución para este problema sea una necesidad real que hay que cubrir.
No descartamos, y es parte de nuestro plan a largo plazo, abordar otro tipo de enfermedades neurodegenerativas. Lo haremos una vez que los fármacos para las enfermedades de degeneración de retina estén avanzados y cerca del mercado.
¿Por qué es un mercado con tratamientos escasos y con precios tan altos? ¿Cuál es la dificultad del mismo?
El tratamiento escaso viene derivado de la dificultad de alcanzar la parte trasera del ojo, donde está la retina, con los fármacos que se están desarrollando, que, además, en muchos casos, no son aplicables a todos los pacientes, quedando un porcentaje muy importante de pacientes sin ningún tratamiento.
Los precios son altos porque las aproximaciones que se están desarrollando implican moléculas complejas, cuya producción es costosa, y que se tienen que administrar como inyecciones intraoculares. Según el tipo de inyección intraocular, subretiniana o intravítrea, puede ser necesaria una intervención quirúrgica y, en todos los casos, el tratamiento lo lleva a cabo un oftalmólogo. Todo esto encarece el tratamiento, además de ser muy agresivo y difícil de seguir por los pacientes.
¿Qué acogida ha tenido vuestro primer producto? ¿Cómo ha sido el desarrollo del mismo? ¿En qué punto se encuentran las pruebas de concepto?
Nuestro primer fármaco, LIM21, ya ha finalizado la prueba de concepto para dos enfermedades degenerativas de retina, Retinitis Pigmentosa y Degeneración Macular Asociada a la Edad en su variante seca. Actualmente estamos en desarrollo preclínico, con experimentos para probar la seguridad del mismo y definir la posología. Estos experimentos hay que hacerlo en condiciones controladas para lograr la aprobación de las agencias reguladoras para poder empezar los ensayos clínicos.
Con respecto a la acogida, como he dicho aún no está en mercado, y quedan unos años. Sin embargo, el interés de las compañías farmacéuticas por nuestros fármacos (de aplicación general en estas enfermedades y de uso tópico) es muy alto y estamos en conversaciones con farmacéuticas e inversores, actualizando el avance en el desarrollo, para cerrar nuestra ronda de financiación y asegurar la realización de los experimentos preclínicos de LIM21.
¿Cómo habéis conseguido que la administración sea en gotas? ¿Qué producto natural utilizáis?
Nuestros fármacos son derivados de resveratrol, un producto natural que se obtiene de plantas y con importantes propiedades antiinflamatorias y antioxidantes. El resveratrol tiene el inconveniente que se metaboliza muy rápidamente, de modo que no puede ejercer sus propiedades terapéuticas. Nuestros fármacos han sido modificados para ralentizar este metabolismo, asegurando el uso terapéutico de las moléculas.
Nuestros fármacos son moléculas pequeñas y, mediante el uso de un excipiente adecuado, logramos que alcancen la parte trasera del ojo cuando se administran tópicamente.
¿Qué implicaciones podría tener la democratización del mismo?
Las enfermedades de degeneración de retina afectan a más de 200 millones de personas en el mundo, de las cuales, solo un 10% tiene tratamiento eficaz. La alta incidencia y el tratarse de enfermedades tan incapacitantes, que causan problemas severos de visión y en muchos casos desembocan en ceguera en unos pocos años, suponen un impacto social y económico enorme.
A diferencia de los fármacos que hay en el mercado, que han de administrarse como inyecciones y además son solo útiles para un 10% de pacientes, los fármacos de Limnopharma son útiles para todos los pacientes y eficaces mediante administración tópica. La administración tópica facilitará el uso y el seguimiento del tratamiento, aumentando, por tanto, la eficacia, además de disminuir los costes. El hecho de que nuestra solución pueda ser útil para todos los pacientes supondrá una mejora en la calidad de vida, no solo de los pacientes, sino también de sus familias.
Somos conscientes de que empresas como la nuestra, que abordan un problema social tan importante, suponen esperanza a millones de personas en el mundo y a sus familias. Con eso en mente trabajamos cada día.
¿En qué otros productos estáis trabajando? ¿Cuáles son vuestras aspiraciones en este sentido?
Además de LIM21, contamos con otros fármacos, en fase de prueba de concepto para otras enfermedades oculares de degeneración de retina, como son la degeneración macular asociada a la edad en su variante húmeda y la retinopatía diabética. También estamos explorando enfermedades del nervio óptico, como la uveitis.
En el sector veterinario estamos empezando una línea de fármacos oculares para tratar las cataratas en animales de compañía, concretamente en perros.
Y a largo plazo, como he mencionado anteriormente, la idea es avanzar en otras enfermedades neurodegenerativas, como son la enfermedad de Parkinson o Alzheimer.
Sois una de las startups ganadoras de Startup Andalucía Roadshow, ¿qué ha supuesto para vosotros?
En primer lugar, ha supuesto un reconocimiento a nuestro trabajo de años, dándonos visibilidad y facilitándonos el acceso a eventos de inversión, donde esperamos encontrar la financiación necesaria para avanzar en el desarrollo de LIM21. Ha supuesto, además, un reconocimiento a la Biotecnología andaluza, que es muy potente, pero que encuentra muchas dificultades a la hora de la transferencia, a la empresa privada y a la Sociedad. Éramos, creo, la única compañía del sector que ha participado en el programa y, aunque los tiempos de desarrollo y hasta mercado de las empresas Biotecnológicas son mayores que de otras startups, el programa ha reconocido el potencial y el buen trabajo, obviando estos tiempos largos.
Por último, la participación en el programa nos ha facilitado sesiones de mentoría y formación muy útiles y contactos que seguro nos van a ayudar en el desarrollo del proyecto.
¿Cómo os ha mejorado su formación y mentoría?
La formación ha sido muy completa, con sesiones que iban desde la formación legal y fiscal, a la formación financiera, formación en comunicación y cultura empresarial, con un profesorado con experiencia en el desarrollo y financiación de startups. En nuestro caso, al ser una startup del ámbito sanitario, con una idiosincrasia diferente, hemos notado una falta en la concreción de estos aspectos para empresas del sector biotecnológico y sanitario, donde los tiempos son distintos y los requerimientos de los inversores también.
La mentoría también ha sido muy fructífera; nuestra mentora era una profesional del ámbito farmacéutico, que se implicó profundamente en el proyecto y nos ha facilitado contactos que han sido y serán de utilidad en el desarrollo del proyecto.
¿Por qué consideráis importantes este tipo de programas? ¿Por qué animaríais a otras compañías a presentarse?
En el caso de startups, surgidas desde el ámbito biotecnológico, este tipo de programas son esenciales para lograr el aprendizaje y el asesoramiento necesario en cuestiones de tipo legal, de gestión de propiedad intelectual y de desarrollo de negocio. Todos estos aspectos imprescindibles para lograr la transferencia de la tecnología. Por supuesto que animamos a otras startups a presentarse a estos programas, recomendando especialmente aquellos específicos para biotecnológicas o en el sector salud.
En un año marcado por el coroanivurs, ¿qué aprendizaje sacáis? ¿Cómo ha afectado a Limnopharma como empresa, como proyecto?
Este año ha sido muy duro para todos y en todos los ámbitos de la vida, no solo en el laboral. Como aprendizaje sacamos la importancia de la perseverancia y la resiliencia, la capacidad de adaptarse a la situación y seguir trabajando para lograr los objetivos marcados.
Para Limnopharma, como empresa y como proyecto, la pandemia ha supuesto un retraso en la consecución de una de nuestras rondas de financiación. Se han retrasado nuestros tiempos unos seis meses, más o menos. Pero, como positivo, sacamos la normalización de las reuniones a distancia. La mejora en la tecnología que permite este tipo de comunicación hace el mundo un lugar más pequeño y facilita la comunicación con posibles colaboradores en cualquier país.
¿Qué hay del futuro? ¿Cuáles son vuestros planes a un medio-largo plazo?
A corto-medio plazo nuestro plan es cerrar la ronda de financiación que va a permitir los experimentos preclínicos de LIM21 y la contratación de personal para asegurar el éxito de este desarrollo preclínico. La idea es comenzar los ensayos clínicos de LIM21 a final de 2023 y, si todo va bien, LIM21 estará en mercado en 2025-2026. Los ensayos clínicos en fase III, así como la comercialización, se harán en colaboración con una compañía farmacéutica mayor, con la capacidad y experiencia necesaria para abordar estos estados de desarrollo.
A medio-largo plazo seguiremos el desarrollo de otros fármacos en cartera. La idea es ampliar nuestro foco no solo a enfermedades oculares, si no también a otras enfermedades neurodegenerativas. Todo esto sin olvidar la Ciencia que cimenta nuestra tecnología, avanzando en el conocimiento del mecanismo de acción de nuestras moléculas y en las posibilidades de mejora, de los fármacos y de las formas de administración.
Dentro de estos, ¿cómo encaja la inversión? ¿Qué apoyo esperáis conseguir?
La inversión es fundamental e imprescindible para asegurar el desarrollo de LIM21. En breve abrimos la ronda A de financiación, presupuestada en 3,5 millones de euros. Esta nos permitirá completar la preclínica regulatoria de LIM21 y la producción de los primeros lotes clínicos, para obtener el visto bueno de las agencias y empezar los ensayos clínicos. Esta financiación también permite avanzar las pruebas de concepto de otros fármacos en cartera.
Número de empresas tech e innovadoras en España
Fuente de datos: Ecosistema Startup, la mayor plataforma de empresas españolas.