"Queremos transformar un sector, cambiar la vida de los abogados e impactar en la sostenibilidad de nuestros clientes"
Attolón es una plataforma tecnológica de servicios jurídicos a empresas con abogados de primer nivel. La compañía ofrece una nueva forma de prestar servicios jurídicos, con el mejor talento y con la última tecnología. Lo hace de forma flexible y sin costes innecesarios.
Los abogados de Attlón tienen una media de 10 años de experiencia en los despachos más prestigiosos del sector y aparecen en los directorios de mayor reputación, destacados como los mejores abogados en su área de práctica.
La iniciativa está impulsada por Carlos Guerrero, también socio fundador de proyectos como Sitka Capital y Akola Venture Builder. Con él habla El Referente sobre su nuevo proyecto.
¿Qué supone para ti a nivel personal lanzar este proyecto en un año tan complicado?
Un oportunidad. Como cualquier startup, en Attolón hemos detectado un problema y vamos a destinar todos nuestros esfuerzos a solventarlo. El sector legal en general con la irrupción de startups legaltech, así como con los servicios jurídicos alternativos (ALSP), ya antes de la pandemia, se encontraba en plena ebullición. Ahora la covid-19 ha sido un catalizador de unos cambios que eran inevitables. Nuestro propósito es cambiar las reglas del juego en la abogacía de los negocios. Nuestra visión es poner patas arriba el sector legal y las firmas tradicionales. Nuestro objetivo es revolucionar los despachos de abogados para empresas y transformar la sociedad.
Queremos transformar un sector, cambiar la vida de los abogados e impactar en la sostenibilidad de nuestros clientes, las empresas. ¿Cómo ejecutamos nuestra visión? En primer lugar, contratando los mejores abogados, abogados de primer nivel en todas las áreas y sectores de derecho de los negocios, ya que nuestro propósito es enorme y transformador y necesitamos a los mejores. Y en segundo lugar, prestando un servicio de máxima calidad mediante abogados senior de primer nivel, de manera ágil, transparente y a un precio cerrado, reduciendo los honorarios de servicios jurídicos hasta un 40 %, y haciendo más sostenible a nuestros clientes.
Tenemos claro que existe una oportunidad, y vamos a ir a muerte para cumplir con nuestra visión. Queremos cambiar el mercado legal y las reglas del sector legal. Esta cultura de innovación y voluntad de cambiar las reglas del juego se encuentra en nuestra cultura de empresa.
¿Y a nivel profesional? ¿Por qué era el momento perfecto?
Por múltiples razones. Me considero un emprendedor en serie. Durante toda mi carrera, que ya son 20 años, he lanzado diversos proyectos y no solo en el sector legal. Desde despachos de abogados, hasta vehículos de inversión y de construcción de startups. Después de 10 años en firmas de abogados de derechos de los negocios, creo que mi etapa había llegado a su fin. El gusanillo de lanzar nuevos proyectos jamás desaparece. Y ahora es un momento espectacular para emprender en el sector de los ALSP y las startups legaltech. Sector legal, maduro, de tamaño de mercado bestial, con poca tecnología y con muchos puntos de dolor que solucionar al usuario empresa.
¿Qué recorrido tienen los servicios jurídicos alternativos en España?
El recorrido en los próximos 10 años es tremendo. Los ALSP (Alternative Legal Services Providers) son operadores del sector jurídico que prestan servicios legales desde una posición diferente a la tradicional. Atentos a la evolución de la economía digital y a las nuevas necesidades del mercado, apuestan por una metodología más ágil, una relación más cercana con el cliente y el uso intensivo de tecnologías que facilitan su trabajo. Todo ello permite flexibilizar la estructura de costes, por lo que no solo ofrecen un servicio más técnico y racionalizado, sino que consiguen reducir los honorarios y gastos a los que debe hacer frente el cliente y tasarlos por anticipado, ofreciendo precios cerrados y asequibles.
Nuestra tarea en Attolon, como ALSP, es ofrecer nuevas posibilidades para la contratación de servicios jurídicos. Nos enmarcamos en el concepto de staffing o trabajo por proyectos, configurando equipos legales a medida para adaptarnos íntegramente a las necesidades de nuestros clientes.
¿Por qué os habéis decantado por los servicios bajo demanda y por proyectos?
Porque es el que más conocemos, y sabemos cuáles son los problemas a solucionar y las palancas de crecimiento. Por otro lado, también es el que tiene un recorrido más pronunciado en la década actual.
¿Cuáles son las ventajas para los abogados, las empresas y las startups?
Somos una firma de servicios jurídicos para empresas grandes nacionales e internacionales, cotizadas y no cotizadas, fondos de capital riesgo, pymes y empresas familiares. Prestamos servicios legales con abogados de primer nivel y a medida para cada proyecto o encargo profesional concreto en función de las necesidades concretas del cliente, en todas las áreas de práctica e industrial o sectores, de forma flexible y bajo demanda. Destacar que los servicios jurídicos son prestados por abogados senior, con precio cerrado y reducción de honorarios de un 40 %.
Gracias a que disponemos de una estructura de costes muy eficiente que se centra en los elementos que realmente aportan valor al cliente, utilizando tecnología y procesos. Asimismo, hemos creado un departamento específico con los mejores abogados para startups de todas las áreas de practica y sectores más innovadores. Con Attolón, una startup en cualquier fase de crecimiento, puede disponer de los mejores abogados de todas las áreas de práctica, a precio cerrado, sin sorpresas, y con una reducción de los honorarios sustancial en relación a otras firmas o boutiques jurídicas.
Disponéis de una estructura de que reduce los honorarios de un 40 %. ¿En qué consiste dicha estructura?
Nuestro equipo está formado principalmente por perfiles de desarrollo de negocio, recursos humanos y gestores de proyectos, además de abogados en plantilla y bajo demanda. Esto nos permite dispone de los mejores abogados por proyectos a un precio muy inferior respecto la competencia. Creamos equipos con agilidad. Somos muchos más flexibles y quien realiza el encargo profesional es un abogado senior, en lugar de un junior, como sucede casi siempre en las firmas tradicionales.
Tenéis sede en Barcelona y planeáis abrir en Madrid y Latinoamérica. ¿Cuáles son vuestras previsiones de crecimiento?
Attolón ya ha seleccionado a 20 abogados de primer nivel, con el objetivo de alcanzar los 50 abogados para completar la primera fase antes de verano en España. Por tanto ya disponemos del mejor talento legal en las principales áreas de práctica e industrias. También para startups de cualquier sector (fintech, insurtech, blockchain, proptech, energía verde, salud, etc).
¿En qué consistirá Attolón Hub? ¿Cómo surge esta idea?
Todavía no podemos proporcionar más información sobre este proyecto, únicamente que lo lanzaremos en mayo- junio de este año.
¿Cuál queréis que sea vuestra relación con el mundo emprendedor y startupero más allá de dicho hub?
Ser el principal partner para cualquier startup, con independencia del estado en el que se encuentre, ya sea fases iniciales, growth o scale-ups. Nuestra ventaja competitiva en relación a las boutiques de startups nacionales y los despachos grandes tradicionales es imbatible. Disponemos de todo el expertise de todas las especialidades del abogado de primer nivel del despacho tradicional, pero con mayor agilidad, con un coste mucho más reducido y con precio cerrado. Y en relación a las boutiques de startups, disponemos de abogados de primer nivel que pueden prestar un servicio 360 º en todas las áreas y especialidades.
¿Un deseo para Attolón?
Transformar la abogacía de los negocios e impactar en la sostenibilidad de nuestros clientes, y la conciliación y felicidad de nuestros abogados.
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