Las Fotografías de Burton Norton en el Círculo de Bellas Artes

El circulo de bellas artes junto al Ministerio de Educación, Cultura y Deporte de Madrid han inaugurado la exposición de `Las Fotografías de Burton Norton’, un proyecto ideado y realizado por Eduardo Momeñe, fotógrafo y autor de artículos y ensayos sobre estética fotográfica. Además el acto de inauguración ha contado con la presencia de Juan Barja, director del CBA y de Antonio Sánchez Luengo, Jefe de Área de Exposiciones, Subdirección General de Promoción de las Bellas Artes Ministerio de Educación, Cultura y Deporte.

Esta muestra presenta un relato que vincula fotografía y texto narrando el viaje del desconocido fotógrafo de Oxford, Barton Nurton por el continente Europeo acompañado de su ayudante W.G Jones, estudiante de literatura.

La gran preocupación de Eduardo Momeñe por la calidad textual, y la dificultad de fusionar texto e imagen han hecho de esta obra un gran reto para el autor “Para mí lo difícil ha sido conseguir el tono en que texto y fotografía puedan ir más o menos vinculados de manera correcta”.

ÉPOCA VICTORIANA

Las imágenes que ilustran esta exposición, que se presentan como realizadas por el misteriosos Barton Norton y que serían narradas mucho tiempo después por W.G Jones, se enmarcan “por su estética” en la época victoriana del SXIX, donde las fotografías “tienen una parte existencial que tiene que ver con la ruptura de la imagen, los propios defectos, carencias del medio y personajes. Todo lo que aparecen en ellas pertenece a otro mundo que ya murió” como apunta Momañe.

Entre las imágenes se puede destacar una obsesión del autor por las casas antiguas y los bosques que hacen referencia un mundo mitológico, a pesar de que es un personaje Newtoniano. En una de las fotografías aparece la casa donde habitó Van Gogh durante dos años sermoneando a los mineros, detalle que no aparece en el relato.

DESCONTEXTUALIZACIÓN FOTOGRÁFICA

Las fotografías de Burton Norton es una obra que “deja muchos espacios abiertos para que todo el mundo pueda entrar” y utiliza la descontextualización de las imágenes fotográficas como vía para tratar los planteamientos del arte contemporáneo y cuestionar así  la “realidad” de la fotografía, que como dice un fragmento de la obra “todo lo que aparece en las fotografías viene de algún lugar del que las fotografías no dicen nada”.

Esta exposición se complementa con un documental realizado con imágenes, fragmentos de películas y comentarios en torno al viaje además de algunas piezas musicales.