Meritxell Molina, a la cabeza en el liderazgo emprendedor desde Demium Startups
Su portfolio crece una media de un 25% por trimestre y 137% por año.
Con 26 años, la joven valenciana Meritxell Molna dirige la red de incubadoras que conforman Demium Startups, y lidera, además, la expansión internacional de la compañía que empezará a finales de 2018. A los 18 años fundó una ONG y a los 21 constituyó su primera empresa en el sector del e-health, la cual internacionalizó tan solo un año después en Holanda, donde nació su primer hijo. En 2016 regresó a España para embarcarse en un nuevo proyecto, Demium Startups.
Demium es una red de incubadoras que conecta las mejores oportunidades de negocio a nivel global con el mejor talento emprendedor, para construir así empresas innovadoras, escalables e invertibles. Actualmente cuentan con incubadoras en Valencia, Madrid, Barcelona, Bilbao y Málaga, y su metodología innovadora en la creación de startups les ha llevado a tener una tasa de éxito del 78% contando con 35 startups en activo. Este éxito se basa en su metodología única y altamente testada que reduce riesgos a la hora de emprender un proyecto escalable de éxito.
Este éxito no solo radica en sus startups, sino también en el equipo que forma Demium: comenzaron 2018 siendo 14 personas y aún no ha terminado el año y ya son 24 y sumando.
Como emprendedora, ¿te unirías a una incubadora como Demium para lanzar tu proyecto?
Te contesto con conocimiento de causa. Con mi empresa pasé por una incubadora en España y por una aceleradora en Holanda, y, aunque me ayudaron en parte, fueron la razón por la que el proyecto de Demium me pareció tan apasionante.
Nuestro modelo no se centra únicamente en el negocio, sino en las personas, en el equipo, que es la clave para el éxito. No buscamos ideas, sino talento, y una vez lo tenemos lo formamos, creamos los mejores matches de equipos y los unimos con las mejores oportunidades de negocio. Una vez llegado ese punto, cada incubadora cuenta con un emprendedor como Director de proyectos, es decir, una persona experta en negocio y en startups que conoce el ecosistema y cómo lanzar un proyecto que funcione, porque lo han hecho con éxito en el pasado. Por ejemplo, nos acompañan Álvaro Villacorta como Director de Demium Málaga, ex CEO de Food Messenger que fue adquirida por Rocket Internet en en 2015, o Joan Álvarez, Director de Demium Barcelona que ha fundado tres startups y llegó a facturar 2M€ en dos años y seis países.
También contamos con profesionales del mundo de Recursos Humanos, con, al menos, un Talent Manager por cada sede, quienes se encargan de la captación y el desarrollo de ese talento emprendedor, con el fin de ayudarles en este complejo camino del emprendimiento. Además, en Demium los proyectos trabajan con un metodología muy marcada, con formaciones y mentorías semanales, así como con una consecución de hitos semanales esenciales para poder avanzar en el programa que les hace trabajar en lo verdaderamente importante y esencial a la hora de lanzar un negocio . En seis meses pasan de no tener idea ni equipo, a construir el "Dream Team", validar la idea de negocio, crear el MVP, identificar el product-market fit, lanzar una solución escalable y recibir inversión… sinceramente, antes de entrar en Demium nunca pensé que fuese posible lograr algo así.
¿Y como inversora?
Tampoco lo dudaría, invertir en Demium es diversificar en un portfolio muy variado y con una tasa de éxito altísima, ahora mismo es invertir en 35 compañías al mismo tiempo. Para que te hagas una idea, nuestro portfolio crece una media de un 25% por trimestre y 137% por año.
Nosotros invertimos en personas excepcionales para crear nuevas startups, los activos se generan anualmente y se convierten en líquidos cuando realizamos una venta parcial o total.
¿Cómo consigue Demium atraer talento?
Empezamos como todos, a través de paid Ads, asistiendo a eventos, contando nuestra historia a los futuros emprendedores una y otra vez…. Pero después de cinco años es un efecto que se ha hecho viral. En cada convocatoria de AllStartup se nos apuntan de media unas 300 personas, de las cuales solo 30 participan en el fin de semanas y alrededor de 17 serán ganadores y entrarán a emprender con nosotros. La clave radica en el marketing, conocemos muy bien a nuestro público y sabemos cuándo y cómo captarlo, hemos conseguido crear confianza y marca, y por último, hemos creado una gran comunidad de emprendedores. Por la incubadora de Demium a día de hoy han pasado más de 4.000 emprendedores de toda España y se han creado más de 450 puestos de trabajo.
¿Cuál crees que es la clave para tener éxito como emprendedor? ¿Qué error consideras que debe evitar un emprendedor?
No considero que haya una clave, hay muchas, e intervienen muchos factores en el emprendimiento, no solo la persona que emprende, pero si tuviera que decir algunas serían perseverancia, resiliencia, sacrificio y visión.
En los errores te diría lo mismo, hay muchos, la mayoría por falta de experiencia o apoyo, pero los más importantes serían, primero, no enamorarse de la idea, la idea en sí no vale nada y que solucione un problema a nosotros mismos no significa que lo vaya a hacer la resto de la humanidad. Después, analizar muy bien qué se quiere lanzar y por qué; muchos emprendedores vienen con ideas que les gustan, no con oportunidades de negocio, no analizan su competencia, el mercado, su target, la viabilidad del negocio… De hecho, muchos se pasan meses ofreciendo un producto donde no hay mercado o enfocándose a un target que no es el suyo, simplemente porque no han hecho un buen análisis y proceso de Lean Startup.
Actualmente diriges la red de incubadoras y te encargas de la expansión, estás en tu segundo año de doctorado y eres madre, ¿cómo lo haces?
La verdad es que tengo un gran equipo tanto dentro como fuera de casa que hacen que conciliar sea posible. Te tengo que decir también que me apasiona lo que hago, cuando emprendes y vives rodeado de emprendedores no trabajas, disfrutas, aprendes, creces, vives nuevas experiencias… ¡Y creamos una gran familia! Tanto, que lo extraño para nuestros emprendedores es que Quique, mi hijo, no esté una tarde correteando por la oficina.
¿Cuáles son vuestros planes de futuro? ¿Dónde crees que estaréis en 2020?
Nuestro objetivo después de verano es focalizarnos en la expansión internacional de Demium. Hemos demostrado que el modelo es replicable creando en España un red de incubadoras. Bilbao y Málaga las hemos abierto en los últimos cuatro meses y ya cuentan cada una de ellas con más de cinco proyectos en activo. En 2020 esperamos estar en las diez principales ciudades del mundo, contando con el norte de Europa, Asia, Latinoamérica y EEUU.
¿De qué startup nacida en Demium os sentís más orgullosos?
Nosotros no estamos orgullosos de ninguna startup, de quienes sí estamos orgullosos es de los emprendedores que las han creado con nosotros. Para emprender hay que ser muy valiente, en algunos casos supone abandonar trabajos estables con sueldos altos para querer cumplir su sueño de crear su propia empresa. En otros casos hemos visto emprendedores que se han mudado de ciudad y que han dejado allí no solo su trabajo, sino también su familia. Son muchas horas, mucha presión… Ver que hay talento y emprendedores que tienen esa actitud es lo que nos hace sentirnos orgullosos.
¿Darías algún consejo a alguien que quiera poner en marcha su proyecto o startup?
El primer consejo es que se lo piensen dos veces, emprender no es un juego. Crear una startup es muy duro, con jornadas de trabajo maratonianas, con un salario de supervivencia, en el caso de que puedan tener un salario durante los primeros meses o incluso en el primer año de vida de la empresa… Hay que ser muy fuerte emocionalmente para aguantar una montaña rusa en la que un día estás en todo lo alto y te crees el rey del mundo y, al día siguiente, piensas que está todo perdido. Pero si es su sueño, mi consejo es que no renuncien a él y que mejor si lo hacen con alguien al lado que les preste el asesoramiento, la metodología y un equipo de trabajo adecuados.
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